FOCALIZACIN TEORICO 5 una restriccin de campo es

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FOCALIZACIÓN TEORICO 5

FOCALIZACIÓN TEORICO 5

 • […] una restricción de «campo» , es decir, de hecho una selección

• […] una restricción de «campo» , es decir, de hecho una selección de la información narrativa con relación a lo que la tradición llamaba la omnisciencia […]. (Genette, 1983, pp. 49 -50) que implica “la elección (o no) de un ‘punto de vista’ restrictivo” (Genette, 1972, 203) Genette, G. (1972). Figures III. Paris: Seuil. • _____(1983). Nouveau discours du récit. Paris: Seuil.

 • FI: «foco situado» es un observador intradiegético • rol actancial de naturaleza

• FI: «foco situado» es un observador intradiegético • rol actancial de naturaleza cognitiva • FE rol de observador intradiegético no actorializado, • posición cognitiva abstracta, desencarnada • F 0 la información narratorial no es intermediada por un observador intradiegético, • gran autonomía actorial, espacial y temporal

Todas las familias felices se parecen unas a otras; pero cada familia infeliz tiene

Todas las familias felices se parecen unas a otras; pero cada familia infeliz tiene un motivo especial para sentirse desgraciada. En casa de los Oblonsky andaba todo trastrocado. La esposa acababa de enterarse de que su marido mantenía relaciones con la institutriz francesa y se había apresurado a declararle que no podía seguir viviendo con él. Semejante situación duraba ya tres días y era tan dolorosa para los esposos como para los demás miembros de la familia. Todos, incluso los criados, sentían la íntima impresión de que aquella vida en común no tenía ya sentido y que, incluso en una posada, se encuentran más unidos los huéspedes de lo que ahora se sentían ellos entre sí Anna Karenina, L- Tolstoi

Su luna de miel fue un largo escalofrío. Rubia, angelical y tímida, elcarácter duro

Su luna de miel fue un largo escalofrío. Rubia, angelical y tímida, elcarácter duro de su marido heló sus soñadas niñerías de novia. Lo quería mucho, sin embargo, a veces con un ligero estremecimiento cuando volviendo de noche juntos por la calle, echaba una furtiva mirada a la alta estatura de Jordán, mudo desde hacía una hora. El, por su parte, la amaba profundamente, sin darlo a conocer. El almohadón de plumas, Quiroga

_¿Viste algo bonito en el salón, Seamus? - Nada para volverse loco. -Esa rubia

_¿Viste algo bonito en el salón, Seamus? - Nada para volverse loco. -Esa rubia estaba buena. Pienso en la feria, todos los hombres en las barandas, ofertando por terneras y ovejas hembras. • Pienso en Santa Claus, usando el mismo papel de envolver que nosotros y, de pronto, entiendo. • Mi padre se hace cada vez más pequeño. • Hombres y mujeres, C. Keegan

…si había que creer en ciertas informaciones, el Número Uno ya estaba un poco

…si había que creer en ciertas informaciones, el Número Uno ya estaba un poco viejo. De todos modos la torpeza dé la orden le daba una ventaja: podía sacar el auto del garaje, estacionarlo con el motor en marcha por el lado de Cochabamba, y quedarse esperando a que Romero llegara como siempre a encontrarse con los amigos a eso de las siete de la tarde. • Cortázar, Los amigos

 • Horacio di Chiano no se mueve. Está tendido de boca (…) Sí,

• Horacio di Chiano no se mueve. Está tendido de boca (…) Sí, ahora la toca a él. La camioneta se acerca, bajo los anteojos de Horacio, desaparece en incandescencias de tiza. Lo están alumbrando, le están apuntando, No los ve, pero sabe que lo están apuntando a la nuca. R. Walsh, Operación masacre

No era una chica a la que una llamada telefónica le produjera gran efecto.

No era una chica a la que una llamada telefónica le produjera gran efecto. Se comportaba como si el teléfono hubiera estado sonando constantemente desde que alcanzó la pubertad. Mientras sonaba el teléfono, con el pincelito del esmalte se repasó una uña del dedo meñique. -¿No trató de hacer el tonto otra vez con los árboles? · 3· -Vuelvo a repetirte que condujo muy bien, mamá. Vamos, por favor. Le pedí que se mantuviera cerca de la línea blanca del centro, y todo lo demás, y entendió perfectamente, y lo hizo. Hasta se esforzaba por no mirar los árboles. . . se notaba. Por cierto, ¿papá ha hecho arreglar el coche? Salinger, El día perfecto para el pez banana

El señor Greenleaf corria hacia ella, con la escopeta en alto, y la señora

El señor Greenleaf corria hacia ella, con la escopeta en alto, y la señora May lo vio venir aunque no miraba en aquella dirección(…) El disparó cuatro veces contra el ojo del toro. Ella no oyò los disparos, pero sintió el temblor del enorme cuerpo mientras se derrumbaba arrastrándola a ella sobre su cabeza, de modo que, al llegar el señor Greenleaf, parecía que la mujer estuviera susurrando una última revelación al oído del animal. • F. O´Connor, Greenleaf