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Cursos en línea – IIHAA – Escuela de Historia- USAC Introducción a la Antropología

Cursos en línea – IIHAA – Escuela de Historia- USAC Introducción a la Antropología de la religión. Dr. Ángel Valdez Estrada

Sesión II. Contenido Para la sesión de hoy se tratarán los siguientes temas: La

Sesión II. Contenido Para la sesión de hoy se tratarán los siguientes temas: La categorización de la divinidad La religión como teodicea Teorías intelectualistas sobre la religión. Conclusiones Tarea. Duración aproximado del vídeo, de 20 a 25 minutos.

Sesión II. La categorización de la divinidad. Como lo hemos visto la semana pasada,

Sesión II. La categorización de la divinidad. Como lo hemos visto la semana pasada, la Teogonía es el término, la categoría que sirve para definir el origen de las divinidades, la cual se remonta a la filosofía griega, porque los pensadores griegos fueron los que se dedicaron –en su momento- a explicar el inicio de sus dioses de una forma “racional”, de tal cuenta existe una obra de la época, escrita por Hesiódo, que en forma poética describe la aparición de los dioses griegos. Una característica de los dioses griegos es su semejanza con los seres humanos, porque experimentan las mismas actitudes que cualquier ser humano: odio, envidia, ira, lujuria, etc. Como puede apreciarse se resalta más lo que ahora se denominan vicios o bien “pecados capitales” en la doctrina católica. Este principio de la humanización de las divinidades pasó a Roma, pero en el caso romano, la divinización no abarcó al emperador en sus inicios, sino a la ciudad en general: Roma, resistió así a la influencia oriental de la divinización del poder.

Sesión II. La categorización de la divinidad. Lo que desea resaltarse es el origen

Sesión II. La categorización de la divinidad. Lo que desea resaltarse es el origen del término “teogonía” que está íntimamente relacionado con el de cosmogonía. La cosmogonía es la explicación del origen de la vida y del universo, en pocas palabras, es la forma de interpretar y dar a conocer cómo se produjo la creación de todo lo existente. Es la respuesta al por qué de las cosas. Todas las teogonías de la antigüedad están íntimamente unidas a las construcciones cosmogónicas que dan respuesta a la pregunta inicial de ¿cómo fuimos creados? , porque todas las cosmogonías tienen como fundamento al ser humano como el centro de esa creación. Difieren en cuanto al grado en que debe considerarse su centro, pero a la larga, caen en un antropocentrismo, debido a que es el ser humano, el único que puede dar culto a la divinidad y reflexionar sobre su ser criatura.

Sesión II. La categorización de la divinidad. Ejemplo de esta postura ante la respuesta

Sesión II. La categorización de la divinidad. Ejemplo de esta postura ante la respuesta de la realidad del origen se encuentran en todos libros sagrados, sobre todo, los que podemos considerar el fundamento de esta construcción teogónica y cosmogónica: los libros de las religiones del Oriente Próximo, para ser precisos, de la zona del Creciente Fértil, lo que hoy es Irán, Iraq y Egipto, así como sus zonas culturales “periféricas”. En las teogonías y cosmogonías fuera de la cuenca del Mediterráneo y del Creciente Fértil se encuentra ese dato también, ejemplo de ello son los libros sagrados de las diversas culturas originarias de América, las tradiciones orales de las religiones animistas en África, o las diversas teogonías en la India. Se dejará fuera de esta enumeración de ejemplos a China y Japón por poseer una lógica distinta en la explicación de la creación, no obstante, en el fondo, subyace la idea de un acto creador y la intervención de una divinidad, unas divinidades, una fuerza divina.

Sesión II. La categorización de la divinidad. El fundamento teogónico y cosmogónico permite una

Sesión II. La categorización de la divinidad. El fundamento teogónico y cosmogónico permite una categorización o clasificación de las divinidades según sus orígenes, así como su acción creadora. En las manifestaciones religiosas primitivas, se encuentra un fuerte vínculo con la tierra, sobre todo en el momento de la transición de la etapa nómada a la sedentaria. Por lo que una de las primeras formas de “culto” están relacionadas con la tierra que, poco a poco, fue adquiriendo un carácter de divinidad. A esta forma de categorizar las divinidades se le llama telúrica, es decir, divinidades vinculadas a la tierra: ejemplo de esto es la representación “divina” de la serpiente, el escarabajo, el maíz, etc. Este es el proceso del totemismo, sistema en el cual los símbolos de animales y/o vegetales fueron vinculados a linajes tribales, siendo esos totems sus divinidades. Como se puede apreciar, el vínculo de la humanización de lo divino aparece aún en las construcciones simbólicas religiosas más antiguas. Lo que se ha ido dando a lo largo de la historia de la humanidad, es una perfección de ese vínculo por medio de un desarrollo de las ideas.

Sesión II. La categorización de la divinidad. Otro tipo de categorización es cuando el

Sesión II. La categorización de la divinidad. Otro tipo de categorización es cuando el concepto de divinidad es elevado al plano de la abstracción, es decir, no dejarlo únicamente en el mundo perceptible, objetivo y material, sino llevarlo a la idea misma. Acá puede destacarse el hecho de las divinidades celestes, la vinculación de lo divino con los astros del cielo y su tránsito en el firmamento que determinó el predecir los cambios climáticos y la instalación de las estaciones. Continuó su representación en formas antropomórfas, zoomorfas o antropozoomorfas, pero su vinculación no es con la tierra propiamente, sino con el cosmos, el espacio, lo que no se conoce pero se aprecia por las noches. Los astros cuya visión permitió establecer caminos, limites territoriales y de acción, comportamientos determinados por el mapa celeste.

Sesión II. La categorización de las divinidades. En el desarrollo de la construcción de

Sesión II. La categorización de las divinidades. En el desarrollo de la construcción de una religión determinada se aprecian también ambos aspectos, es decir, elementos celestes, telúricos, antropomorfos, zooformos, etc. A medida que avanzó la concreción de la idea de la divinidad, esta quedo en el plano de la revelación comprensible únicamente para los iniciados, de acá surgen las religiones mistéricas. En mayor o menos grado se encuentra este elemento en toda religión y eso sucedió en cuanto se convirtió en un instrumento de cohesión y control social. El sedentarismo permitió la elaboración de los códigos y normas derivadas de esa situación mistérica del mensaje divino, estos reunidos en libros, en formas gráficas de los dinteles y paredes de los templos, en la tradición oral.

II Sesión. La categorización de las divinidades. La región del Oriente Próximo vio el

II Sesión. La categorización de las divinidades. La región del Oriente Próximo vio el nacimiento de la idea de una divinidad única, creadora, de quien emanan las demás divinidades en el panteón respectivo. Pero la idea de una divinidad única tuvo mayor profundidad en el Egipto Antiguo, asimismo se tienen evidencias en algunas tradiciones orales mesopotámicas y sobre todo, en la heredera de esas mitologías: el zoroatrismo. La síntesis, por tanto, de la idea de una única divinidad creadora inicial, surgió en los desiertos delimitados por el Tigris y el Eufrates, pero su mayor avance se puede observar en Egipto. Resulta aventurado hablar de originalidad en la construcción de sistemas religiosos en estos tiempos, ante la evidencia que los argumentos que ahora se esgrimen como novedad, habían sido tratados miles de años antes de Cristo.

Tres muestras del dios sol en Egipto. Amonra, Aton, Ra.

Tres muestras del dios sol en Egipto. Amonra, Aton, Ra.

Sesión II. La religión como teodicea Este tema está íntimamente unido al siguiente subtitulado

Sesión II. La religión como teodicea Este tema está íntimamente unido al siguiente subtitulado “Teorías intelectualistas de la religión”. Teodicea es la rama de la filosofía que se dedica al estudio racional de la divinidad, pero desde la filosofía y no desde la teología. Algunos autores la relacionan con la filosofía natural, porque estudia las respuestas a las preguntas que dieron origen a las construcciones filosóficas. En las tres religiones monoteístas –dedicaremos unas clases a su análisis- se presentan momentos de una teodicea que permitió el análisis de la divinidad, pero fuera de sus estructuras de creencias, sobre todo, de sus liturgias, para resaltar el hecho de la existencia de la divinidad independientemente de la religión, es decir, es externo a la especie humana a la cual creo. Precisamente esta es la función de la religión como una teodicea, porque busca la pluralidad en cuanto a las creencias pero la unanimidad sobre la existencia de una divinidad. De hecho el atribuirle “existencia”, es una analogía para explicar que la divinidad ES en si misma.

Sesión II. La religión como teodicea. Aunque la Teodicea “moderna” arranca con Leibniz, se

Sesión II. La religión como teodicea. Aunque la Teodicea “moderna” arranca con Leibniz, se encuentran fundamentos de la misma en los trabajos y la postura de San Agustín – Agustín de Hipona- cuyo intento de explicar la fe cristiana en un mundo romano y de pensamiento helenístico, lo lleva a utilizar los mismos códigos del pensamiento vigente - y que eran una globalización- para explicar el cristianismo. Este proceso de “conversión” de los códigos judíos presentes en el mensaje de Jesús, a los propios del mundo romano, habían iniciado con San Justino, considerado el primer filósofo cristiano. En el caso de San Agustín y de San Justino era compatibilizar razón y fe en el conocimiento de la verdad cuya esencia es Dios, de ahí la frase de San Juan con el Logos, el verbo, que fue el punto de partida en ambos pensadores. Para Leibniz, la preocupación era la comprensión racional del mal y su existencia, así como la bondad divina y cuya prueba de ello era el mejor de los mundos que podía existir. Es el primero de los filósofos modernos que rescata el término teodicea en su libro “Ensayo de Teodicea”.

Sesión II. La religión como teodicea Los intentos de una explicación filosófica de la

Sesión II. La religión como teodicea Los intentos de una explicación filosófica de la divinidad y por tanto, de manera racional, también se produjo en el Islam, sobre todo el correspondiente al período del Al Andalús, en concreto en el siglo XIII, lo que permitió el avance de la ciencia islámica. Los escritos de pensadores cristianos como los citados, así como las obras de la filosofía clásica y sobre todo Aristóteles, influyeron poderosamente en los pensadores islámicos. Lamentablemente fuerzas que buscaban la pureza del rito sobre la necesidad de la racionalidad de la divinidad, sofocaron aquellos intentos y determinaron la rigidez en el estudio de los escritos sagrados islámicos.

Sesión II. Teorías intelectualistas sobre la religión. En este apartado se enlaza en sí

Sesión II. Teorías intelectualistas sobre la religión. En este apartado se enlaza en sí con los temas propios de la Antropología de la Religión, porque se analizarán los diversos pensadores y las diversas corrientes desde las que se han estudiado las religiones en general y el hecho religioso en particular. El interés por la religión en sí, pero sobre todo, del estudio de la divinidad que inauguró Leibniz, derivará a una serie de corrientes las cuales se irán condensando acá. Los estudios de las religiones tendrán su impulso con el racionalismo extremo del positivismo que en su intento de la búsqueda de la objetividad, se embarcó en la empresa de desmentir los argumentos religiosos por considerarlos no racionales. Y en ese esfuerzo, produjo obras, corrientes del pensamiento y formas de analizar la temática que nos ocupa en este curso. La densidad de la lección de hoy, nos lleva a decirles que nos vemos la otra semana.

Muchas Gracias.

Muchas Gracias.