DIOS ESTAS AH DIOS ESTAS AH Por favor

¿DIOS ESTAS AHÍ?

DIOS ESTAS AHÍ Por favor Contéstame

Quizá tu dirás: ¿donde estaba Dios cuando fui menospreciado, menospreciada, ultrajado, humillado o violado, violada? Quizá tu has pensado que para Dios tu bales nada por todo lo que has tenido que pasar, pero yo te digo que tu bales mucho, que Dios no te ha olvidado, aún antes que tu existieras Jesús dijo en (Mat. 5: 22). «Yo pues os digo, que cualquiera que se enojare sin razón con su hermano, estará expuesto a juicio; y cualquiera que dijere a su hermano: Raca, estará expuesto al concilio; y cualquiera que a su hermano dijere: Insensato, estará expuesto al fuego del infierno» .

Sal. 22: 9, 10. «Pero tú eres el que me sacó del vientre; El que me hizo estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre. 10 Sobre ti fui echado desde antes de nacer; Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios» . Sal. 27: 2. «Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores y mis enemigos, Para comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron»

2 Sam. 13: 5, 11. Y Jonadab le dijo: Acuéstate en tu cama, y finge que estás enfermo; y cuando tu padre viniere a visitarte, dile: Te ruego que venga mi hermana Tamar, para que me dé de comer, y prepare delante de mí alguna vianda, para que al verla yo la coma de su mano. Y cuando ella se las puso delante para que comiese, asió de ella, y le dijo: Ven, hermana mía, acuéstate conmigo. Amón era hijo de David en Ajinoam de Jezrael, Tamar, hija de David en Maacá. O sea que, eran hermanos de padre más no de madre.

Juan 8: 3. Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; Esta mujer, que algunos la identifican como María Magdalena, era una hermana entregada a las cosas de Dios, pero debido a la confianza que le tenía a los hermanos en la fe, fue engañada y violada por uno de sus hermanos en la fe que era casado, de quien no sabemos su nombre, quien formaba parte de «aquellos hombre que se daban por guardianes de la justicia habían INDUCIDO ellos mismos a su victima al pecado» . Y fue presentada ante Jesús con el propósito de que fuera condenada a muerte. D. T. G. 425. p 3. El registro dice que Cristo la salvó, diciendo: «el que este sin pecado tire la primera piedra» . De esa forma fue salvada de sus verdugos. Ella en gratitud con Jesús algún tiempo después, derramó un frasco de perfume a sus pies (Juan 12: 3). Y consagró su vida al servicio de Dios nuevamente. Y fue tal su relación con el Señor que fue la primera que vio a Jesús resucitado, y comisionada a comunicarle a los discípulos la buena noticia. Juan 8: 7 -11.

Gen. 32: 22 -39. Y se levantó aquella noche, y tomó sus dos mujeres, y sus dos siervas, y sus once hijos, y pasó el vado de Jaboc. 23 Los tomó, pues, e hizo pasar el arroyo a ellos y a todo lo que tenía. 24 Así se quedó Jacob solo; y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba. 25 Y cuando el varón vio que no podía con él, tocó en el sitio del encaje de su muslo, y se descoyuntó el muslo de Jacob mientras con él luchaba. 26 Y dijo: Déjame, porque raya el alba. Y Jacob le respondió: No te dejaré, si no me bendices. 27 Y el varón le dijo: ¿Cuál es tu nombre? Y él respondió: Jacob. 28 Y el varón le dijo: No se dirá más tu nombre Jacob, sino Israel; porque has luchado con Dios y con los hombres, y has vencido. 29 Entonces Jacob le preguntó, y dijo: Declárame ahora tu nombre. Y el varón respondió: ¿Por qué me preguntas por mi nombre? Y lo bendijo allí.

Jacob, a pesar de que fue herido por Dios en uno de sus muslos, su fe no menguó, por el contario se fortaleció más hasta el día de su muerte.

Isaías 49: 25. Pero así dice Jehová: Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano; y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos. Prov. 7: 26. Porque a muchos ha hecho caer heridos, Y aun los más fuertes han sido muertos por ella. (La muerte). Aún en medio de la enfermedad tu puedes decir: «Y después de deshecha esta mi piel, Aun he de ver en mi carne á Dios» (Job. 19: 26).

Sal. 27: 2 -4. Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores y mis enemigos, Para comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron. 3 Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado. Sábado. 4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.

Mar. 2: 17. Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores. Mar. 5: 32 -34. Pero él miraba alrededor para ver quién había hecho esto. 33 Entonces la mujer, temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de él, y le dijo toda la verdad. 34 Y él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote.

Jer. 33: 2, 3, 6. Así ha dicho Jehová, que hizo la tierra, Jehová que la formó para afirmarla; Jehová es su nombre: 3 Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces. 6 He aquí que yo les traeré sanidad y medicina; y los curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad. Necesitamos aprender de un niño, que siempre acude a su padre para pedirle lo que necesita.

Sal. 32: 5. Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah. Mal. 3: 2, 3. ¿Y quién podrá soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando él se manifieste? Porque él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores. 3 Y se sentará para afinar y limpiar la plata; porque limpiará a los hijos de Leví, los afinará como a oro y como a plata, y traerán a Jehová ofrenda en justicia.

Mat. 28: 20. enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. Yo te invito en este momento, que si tu has pasado por una situación como la que tuvieron que pasar las personas descritas en la Palabra de Dios, no te desanimes, Dios te ama, El esta cerca de ti y ha visto tu sufrimiento, y ha escuchado cada una de tus peticiones. Indudablemente que Él suplirá todas tus necesidades. Amen.