Unidad N 2 Amor en la Literatura Objetivo

Unidad Nº 2 Amor en la Literatura

Objetivo Conocer algunas de las principales concepciones del amor, temas asociados a él y tipos de amor en la literatura.

El amor en la literatura. Amor Ø Sentimiento de vivo afecto o inclinación hacia una persona o cosa a la que se le desea todo lo bueno. Ø Sentimiento de intensa atracción emocional y sexual hacia una persona con la que se desea compartir algo o una vida en común.

¿De qué hablamos cuando hablamos de amor? El amor es una experiencia compleja que está siempre presente en nuestra vida cotidiana y que resulta casi inexplicable. A pesar de esto, algunas de las obras que lo abordan resultan ser parte de una de las más bellas manifestaciones literarias de todos los tiempos

Algunos tipos de manifestaciones amorosas en la Literatura…

Amor Tirano Amor Idealizado Amor Romántico Amor Platónico Amor Recíproco Amor Fraternal Tipos de manifestaciones amorosas en la literatura. Amor Cortés Amor Místico Amor Sexual

El Amor Romántico La Iliada de Homero Romeo y Julieta. Va más allá del deseo sexual o la lujuria, y generalmente implica una mezcla de deseo emocional y sexual, aunque se le dé más énfasis a las emociones. Es más espiritual que sensual. Es una forma de amor y amistad en que no hay un elemento sexual El Amor Platónico El niño que enloqueció de amor

El Amor Cortés Tipo de amor platónico, que comprende una sumisión del enamorado a la dama (ambos aristocráticos), la que está siempre distante y admirable. Se basa únicamente en la satisfacción de los deseos carnales, independiente de los sentimientos. El Amor Sexual. Rayuela

El Amor Fraternal Se dirige hacia todos los seres humanos, se caracteriza por su falta de exclusividad. Amor perfecto e inalcanzable donde no hay contacto carnal. El enamorado exalta al objeto de su amor. El Amor Idealizado. Don Quijote no espera el momento de encontrarse con su “sin par” Dulcinea del Toboso y dedicarle todas sus aventuras.

El Amor Místico. La Biblia. Elevado enamoramiento con un ser divino, su tema es la unión mística del alma (amor espiritual). El éxtasis amoroso está dado con Dios, No existe reciprocidad, no existe correspondencia. Es aquel que encierra o priva a un ser humano de libertad comprometiendo seriamente su felicidad, esta libertad se puede presentar de diferentes formas (situaciones), como son el encierro de la propia mente, el creer ser dueño de alguien (celos), el abandono sentimental, (en el plano de solo dar ordenes y no afecto) etc. El Amor Tirano.

Ejemplos. Madre es la palabra hermosa esculpida en el corazón, con el cincel del amor, es un grabado profundo que no hiere, es una marca indeleble que no muere. . . Madre es la mágica rosa plantada en el corazón, con la mano del amor, la misma que te acaricia siempre tierna, esa que jamás muere porque es eterna. . .

Daría la vida por esa mirada cautivadora, porque cada palabra que digas fuera para mí, por besar esa boca que me derrite sin tocarla, para tocarte con ojos de amor y no de algo menos, para sentirte siempre en mí. Que me hables con amor te pido, que tú alma me ame tanto como yo amo a la tuya, te doy mi vida a cambio de esa sonrisa tuya. Si no fueras imposible sería feliz, y tal ves si te tuviera no te amara tanto, pero sólo tal vez, porque con la oportunidad de tenerte mi vida no sería vida, sería muerte porque la vida la tuvieras tú.

Todo esfuerzo es importante y necesario, en ocasiones el sacrificio se hace presente y nunca jamás estará ausente la devoción consciente por que el Amor es una oración que se dice en palabras y también en hechos. Dios me ha regalado la vida y me ha dado también el don maravilloso de la comprensión y el entendimiento, me da el respeto y el sentimiento. Y ha puesto en mi corazón la experiencia real de vivir.

"Veinte poemas de amor y una canción desesperada" Pablo Neruda Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos te pareces al mundo en tu actitud de entrega. Mi cuerpo de labriego salvaje te socava y hace saltar al hijo del fondo de la tierra. Fui solo como un túnel. De mí huían los pájaros, y en mí la noche entraba su invasión poderosa. Para sobrevivirme te forjé como un arma, como una flecha en mi arco, como una piedra en mi honda. Pero cae la hora de la venganza y te amo. Cuerpo de piel, de musgo, de leche ávida y firme. Ah los vasos del pecho! Ah los ojos de ausencia! Ah las rosas del pubis! Ah tu voz lenta y triste! Cuerpo de mujer mía, persistiré en tu gracia. Mi sed, mi ansia sin límite, mi camino indeciso! Oscuros cauces donde la sed eterna sigue, y la fatiga sigue, y el dolor infinito.

Soneto. Dulce sonrisa nevada, y una mirada de fuego, bella camina por Pliego, lindas mejillas rosadas. Duerme en la orilla varada, olas del mar en su pelo, puede derretir el hielo, con su mirada encantada. Es brisa, canción, ternura, despertar de los sentidos, bella y delgada cintura. Te hace perder la cordura, parece con sus vestidos, más que persona, escultura.

¿Por qué me duele tanto tu desprecio? ¿Por qué te sigo amando todavía? Por qué al tocar tus manos. . . en vez de desdén siento alegría Amor tirano. ¿A caso te divierte mi dolor? ¿A caso no tienes corazón? Sabes que por ti muero cada instante de mi vida Que aquellas palabras malévolas que dijiste un día; Fueron el sepulcro donde enterré las fantasías Y los sueños de amor que solo a ti te pertenecían Amor tirano Acaso sabes lo que es amar, Acaso has de llorar. . . Y tu condena será Vivir eternamente en soledad A causa de tu orgullo y vanidad.

Yo, para ti. Tú, para mí. Hidrógeno y oxígeno, juntos forman vida, agua que se une en un mismo fluir. Siempre al lado mío, siempre junto a mí compartiendo mi silencio, mi soledad y existir. Cuando nadie te veía allí estabas junto a mí y mis penas se hacían tuyas, mis cargas con mi dolor y la tristeza que me hastiaba el pensamiento y la razón.

Acude raudo, antes de la hora fijada, A tu encuentro con la amada; Aguárdala pacientemente en la calle. Desafía los golpes de la multitud; Corre a cumplir sus deseos. No te inquietes si otros asuntos te aguardan; Si ella reclama tu presencia, protégela como un centinela Cuando vuelva del baile. Y así encontrándote en bucólicos pasajes te llama, Toma tu carro camina hasta Roma. Que no te detenga el tórrido verano Ni el peso de la nieve. ¡Fuera los cobardes! Nuestro señor, Amor, en sus campos de batalla Desdeña vuestra tibia servidumbre