Los Panchos encontraramse pela primeira vez em 1944

  • Slides: 10
Download presentation
Los Panchos encontraram-se pela primeira vez em 1944, em Nova Iorque. Os primeiros membros

Los Panchos encontraram-se pela primeira vez em 1944, em Nova Iorque. Os primeiros membros eram os mexicanos Alfredo Gil, e Chucho Navarro, que permanentemente faziam parte do trio, e Hernando Avilés, de Porto Rico. Cada membro de Los Panchos tocava violão e cantava. Entre 1946 e 1948, Los Panchos atuaram nos Estados Unidos, incluindo um o Radio City Music Hall em Nova Iorque. Los Panchos começaram a atuar internacionalmente em 1946. Nesse mesmo ano, Los Panchos mudaram para o México, a capital da música de língua espanhola. Julito Rodríguez entrou para o grupo em 1952 e foi substituído por Johnny Albino em 1958. Em 1971, Ovidio Hernández entrou para o trio como principal vocalista, até falecer de meningite em 1976. Após ele, Rafael Basurto Lara entrou como principal vocalista e é hoje a última pessoa viva de ter sido principal vocalista no trio original. Alfredo Gil atuou com Los Panchos até sua aposentadoria em 1981 (morreu em 1999) e Chucho Navarro atuou com o trio até sua morte em 1993. Solamente una vez (Introdução) Músicas © M. D. Martins 2010

© M. D. Martins 2010

© M. D. Martins 2010

Contigo aprendí que existen nuevas y mejores emociones. Contigo aprendí a conocer un mundo

Contigo aprendí que existen nuevas y mejores emociones. Contigo aprendí a conocer un mundo nuevo de ilusiones. Aprendí que la semana tiene más de siete días, a hacer mayores mis contadas alegrías y a ser dichoso yo contigo aprendí. Contigo aprendí a ver la luz del otro lado de la luna. Contigo aprendí que tu presencia no la cambio por ninguna. Aprendí que puede un beso ser más dulce y más profundo, que puedo irme mañana de este mundo. Las cosas buenas yo contigo las viví. Contigo aprendí que yo nací el día que te conocí. Continuar © M. D. Martins 2010

Reloj, no marques las horas, porque voy a enloquecer. Ella se irá para siempre

Reloj, no marques las horas, porque voy a enloquecer. Ella se irá para siempre cuando amanezca otra vez. No más nos queda esta noche para vivir nuestro amor y tu tic-tac me recuerda mi irremediable dolor. Reloj, detén tu camino, porque mi vida se apaga. Ella estrella que alumbra mi ser, yo sin su amor no soy nada. Detén el tiempo en tus manos, haz esta noche perpetua, para que nunca se vaya de mí, para que nunca amanezca. Continuar © M. D. Martins 2010

Frío en el alma desde que tú te fuiste, sombra y angustia sobre mi

Frío en el alma desde que tú te fuiste, sombra y angustia sobre mi corazón. ¡Qué loco empeño de revivir la historia de un cariño ya muerto, del fantasma de ayer! Frío en el alma porque no estás conmigo, sombra que llevo como una maldición. Le he pedido a la Virgen que tú vuelvas, porque si tú no vuelves me matará el dolor. Continuar © M. D. Martins 2010

Dicen que la distancia es el olvido, pero yo no concibo esta razón, porque

Dicen que la distancia es el olvido, pero yo no concibo esta razón, porque yo seguiré siendo el cautivo de los caprichos de tu corazón. Supiste esclarecer mis pensamientos; me diste la verdad que yo soñé; ahuyentaste de mí los sufrimientos en la primera noche que te amé. Hoy mi playa se viste de amargura, porque tu barca tiene que partir a cruzar otros mares de locura (cuida que no naufrague en tu vivir). Cuando la luz del sol se esté apagando y te sientas cansada de vagar, piensa que yo por ti estaré esperando hasta que tú decidas regresar. Continuar © M. D. Martins 2010

Siempre que te pregunto que ¿cuándo? ¿cómo? y ¿dónde? Tú siempre me respondes: Quizás,

Siempre que te pregunto que ¿cuándo? ¿cómo? y ¿dónde? Tú siempre me respondes: Quizás, quizás. Y así pasan los días y yo desesperando y tú, tú contestando: Quizás, quizás. Estás perdiendo el tiempo pensando, por lo que más tú quieras, ¿hasta cuándo? Continuar © M. D. Martins 2010

Tanto tiempo disfrutamos de este amor, nuestras almas se acercaron tanto así que yo

Tanto tiempo disfrutamos de este amor, nuestras almas se acercaron tanto así que yo guardo tu sabor, pero tú llevas también sabor a mí. Si negaras mi presencia en tu vivir bastaría con abrazarte y conversar. Tanta vida yo te di que por siempre llevarás sabor a mí. No pretendo ser tu dueño, no soy nada, yo no tengo vanidad. De mi vida doy lo bueno, soy tan pobre, ¿qué otra cosa puedo dar? Pasarán más de mil años, muchos más, yo no sé si tenga amor la eternidad, pero allá, tal como aquí, en la boca llevarás sabor a mí. Continuar © M. D. Martins 2010

Sin ti no podré vivir jamás y pensar que nunca más estarás junto a

Sin ti no podré vivir jamás y pensar que nunca más estarás junto a mí. Sin ti ¿qué me puede ya importar, si lo que me hace llorar está lejos de aquí? Sin ti no hay clemencia en mi dolor, la esperanza de mi amor te la llevas al fin. Sin ti es inútil vivir como inútil será el quererte olvidar. Continuar © M. D. Martins 2010

Solamente una vez amé en la vida. Solamente una vez y nada más. Una

Solamente una vez amé en la vida. Solamente una vez y nada más. Una vez nada más en mi huerto brilló la esperanza, la esperanza que alumbra el camino de mi soledad. Solamente una vez se entrega el alma, con la dulce y total renunciación. Y cuando ese milagro realiza el prodigio de amarse hay campanas de fiesta que cantan en el corazón. Reiniciar © M. D. Martins 2010 SAIR