LIBRO ILUSTRAD O El libro ilustrado es la
LIBRO ILUSTRAD O
El libro ilustrado es la fusión de la imagen gráfica y el relato literario; donde ambas manifestaciones artísticas se complementan. La ilustración del libro incrementa y aporta conexión, coherencia y contenido a la obra literaria, donde el relato busca las orientaciones que conducen a la fantasía por el camino de lo nuevo y diferente. Un libro ilustrado ofrece a los lectores placer, entretenimiento y sobre todo una experiencia creativa y estética.
El álbum ilustrado es un conjunto armónico de ilustración y texto. En algunos casos pesa más la imagen y en otros la palabra. Se trata, pues, de un tipo de libros que busca una comunicación con los lectores, a través de una doble vía: la de la ilustración y la del texto escrito. De esta forma, la propuesta resulta enriquecedora para un lector que debe interpretar dos códigos diferentes. El potencial imaginario del lector juega sobre esos dos registros.
Su nacimiento se sitúa entre la década de 1960, aunque, anteriores a dicha fecha, se conocen ejemplos de libros ilustrados que se podrían enmarcar dentro de esta definición. En la actualidad, este género, se encuentra en su "edad de oro", ya que son numerosas las editoriales que apuestan por este formato, más visual y práctico a la hora de transmitir ideas que bien pueden ser sencillas o complejas.
En un principio, en este tipo de publicaciones, cada página contenía un fragmento del texto acompañado por una única imagen. Este género ha ido evolucionando de tal forma que existen obras sin texto, compuestas exclusivamente por la característica narrativa de las ilustraciones o imágenes.
En un libro ilustrado, la imagen es lo primero que el lector ve, es la primera impresión de la historia. Tiene varias funciones: v. Crea la atmósfera de la obra: los colores y la técnica que el ilustrador utiliza, indican el ambiente en que se sitúa la historia. v. Aporta información al lector sobre el entorno, personajes, etc. v. Da el tono. Las ilustraciones sugieren el contenido del cuento. (humorístico, poético, irónico, etc. ) v. Provoca al espectador en su sensibilidad más íntima, poniendo en escena situaciones que favorecen tomas de postura en relación con lo expuesto por el autor. v. Ofrece la oportunidad de un diálogo. El lector mira la imagen y ésta a su vez penetra en el lector, produciéndole sensaciones, como risa, miedo, sorpresa, ternura, etc.
Por tanto, la ilustración en los libros no es un adorno, ni pretende facilitar la lectura de los textos. Ofrece una nueva lectura que sobrepasa los límites del texto y que no se realiza de forma lineal, sino que permite un trayecto más libre, donde el lector es quien elige los detalles en que recrearse. A diferencia del cine o la televisión, el lector puede dominar el ritmo del movimiento y dedicar el tiempo que quiera a un detalle, un personaje o una acción que le atrae.
El álbum debe presentar una imagen muy cuidada, no sólo en la calidad de sus ilustraciones, sino también en el aspecto estético del conjunto del libro: la maquetación, la portada, la distribución del texto y el dibujo a lo largo de las páginas son elementos importantes en la edición de este tipo de libros.
Características del álbum ilustrado: • La proporción de la imagen es igual o mayor, respecto al texto. • Mantiene una estructura secuencial que refuerza la narrativa, la apoya y la enriquece. • Contiene importantes experimentaciones semánticas en el terreno gráfico, heredadas, no tanto de la pintura como del cine o la publicidad.
Objetivo del álbum ilustrado: • Su objetivo principal es la comunicación visual, y no la oral o literaria.
El Libro de Los Muertos Egipto ha producido muchos papiros ilustrados, de los cuales El Libro de Los Muertos (texto funerario del siglo XV a. C. ) y El papiro de Ani (Escrito durante la dinastía XVIII, hacia el siglo XIII) todos decorados con dibujos que explican cada paso del juicio de Osiris y mide casi 26 metros. El papiro de Ani (museo Británico)
Roma, aunque se conserva poco de la ilustración Romana con algunos códices en pergamino, que tanto ha favorecido el proceso artístico. Se puede nombrar como ejemplo el Vergilius Romanum (Ciudad del Vaticano, siglo V, trabajo realizado por Virgilio con 309 hojas, escrito con 18 líneas por página).
«El leopardo» del Bestiario de Rochester (siglo XIII) La escuela visigótico de San Millán de la Cogolla durante el siglo X En la Edad Media hubo un resurgimiento en la ilustración (o iluminación de manuscritos) con iniciales entremezcladas con hojas y cabezas de animales reales e imaginarios (Bestiarios o bestiarum vocabulum) y motivos ornamentales. Más tarde surgen figuras en la escuela visigótica según la tradición del norte de Africa, y de ahí la tendencia a representar pasajes del Antiguo Testamento.
Libro de Durrow (evangeliario de fines S. VII) escrito en Northumbria (norte de Inglaterra), o en la abadía de Durrow cerca de Durrow, en el condado de Laois, en Irlanda. El Cathach de San Columbus (Dublín, Real Academia Irlandesa fines S. VI), asociada con San Columba, fallecida el 597, el libro contiene 58 páginas entre dañadas e incompletas.
El Códice de Amiatinus (siglo VI) Fue manufacturado en pergamino en el monasterio de Jarrow-Wearmouth, Northumberland, consta de 1, 029 hojas. El Codex Useranius Primus (med. del siglo VII) (Biblioteca de Dublin) escrito en Latín antiguo. El manuscrito se encuentra dañado, con las hojas decoloradas y fragmentadas, contiene 180 páginas.
The Lindisfarne Gospels 698 d. C. (Londres, Biblioteca Británica) es un manuscrito iluminado en el monasterio de Northumberland en Lindisfarne.
El Libro de Kells 800 d. C. (Biblioteca del Trinity College, Dublín (Irlanda), Conocido como el Gran Evangeliario de San Columba, es un manuscrito ilustrado con motivos ornamentales, realizado por monjes celtas en Kells, un pueblo de Irlanda. El libro está inconcluso y es considerado la pieza principal del cristianismo celta y del arte irlando-sajón, es uno de los más suntuosos manuscritos iluminados que han sobrevivido a la Edad Media.
El Physiologus es un manuscrito redactado en griego por un autor desconocido, y compilado con fines moralizantes. Probablemente se escribió en Alejandría, entre el siglo II y el IV. Fue uno de los libros más populares de la Edad Media, que aparece en la mayoría de las lenguas vernáculas de Europa, así como en griego (su idioma original) y en latín. El Physiologus contiene un conjunto de descripciones de diversos animales, criaturas fantásticas, plantas y rocas, la mayoría con frases y sentencias moralizantes. Es el predecesor de los bestiarios medievales ( «libros de bestias» ) de los siglos XII y XIII.
El Bestiario de Aberdeen (Inglaterra, Siglo XII) Es una recopilación de distintos libros similares, principalmente el physiologus griego, además incluye capítulos del Génesis, como los primeros siete días de la creación. Los bestiarios eran compilaciones de todo tipos de animales, reales o imaginarios, acompañadas de una explicación moralizadora. Uno de los elementos más llamativos del Bestiario de Aberdeen son las ilustraciones, en las que los dibujantes dejaron volar libremente su imaginación.
El Pentaeúco de Ashburnham o la Biblia de Tours (siglo VII) Es la denominación bibliográfica de un códice iluminado paleocristiano o prerrománico, de datación y origen discutidos. Originalmente contenía los cinco libros del Pentateuco (los primeros de la Biblia), aunque se ha perdido todo el Deuteronomio y parte de los demás libros. En total se conservan 142 páginas con 19 ilustraciones a toda página (se calcula que inicialmente contenía 68 ilustraciones). Algunas de ellas desarrollan una única escena (como el Arca de Noé, Caín y Abel).
Biblia de San Isidoro o Biblia mozárabe de León (siglo X) es una Biblia visigótica mozárabe del año 960. El códice se encuentra en el Archivo del Museo de la Colegiata de San Isidoro. Es considerada no sólo uno de los manuscritos medievales más raros y más valiosos sino que también es la Biblia mozárabe mejor documentada existente. Esta Biblia contiene todos libros del Antiguo y Nuevo Testamentos, está escrito en letra minúscula visigótico-mozárabe con letras iniciales mayúsculas en el estilo entrelazado sajón y decorada con escenas bíblicas.
Los Beatos (siglos VIII-XI) Se denominan Beatos a los distintos códices manuscritos, copias de aquel comentario al Libro del Apocalipsis (Explanatio in Apocalypsin) de San Juan que en el año 776 realizara Beato de Liébana abad del monasterio de Santo Toribio, en el valle de Liébana (Cantabria). Es un género librario específicamente hispano.
Colección Scriptorium: incluye Beatos, el Códice de las constelaciones o de Metz, Códice áureo, Biblia Hebrea, Corán de Muley Zaydán, Libros de Horas de Isabel la Católica etc. La Colección pretende recuperar aquellos monumentos de la bibliografía. En un principio se producían manuscritos sobre resistentes pergaminos, que custodiaban las esencias litúrgicas y religiosas de la Cristianidad.
Anton Koberger (1440– 1513) Alemania. Publicó el Nuremberg Chronicle, que fue un exito en ventas en ese tiempo, y además fundó la primera imprenta en Nuremberg. El Libro Impreso que se introduce a Europa en 1455 y con la invención de la Imprenta (1436 -1450) se redujo considerablemente la actividad de los iluminadores, quienes empezaron a utilizar iniciales y estampas grabadas por distintos procedimientos. Existen en esta época ilustraciones de grabados populares de escaso valor artístico, pero también existen libros, impresos por Anton Koberger o Aldo Manuccio por ejemplo, que se hicieron famosos por su calidad, la Biblia Pauperum
Antecedentes: siglos XVII y XVIII El arte de la ilustración enfocado a los niños es algo reciente, puesto que su verdadero auge no se produjo hasta el siglo XIX. Sin embargo, en 1658 se señala como el punto de partida: la publicación en Alemania del Orbis Sensualium Pictus (publicado en 4 idiomas) el primer libro ilustrado para niños, obra de un filósofo y teólogo checo llamado Jan Amos Comenius (1592 -1670). Se trata de un libro pionero y revolucionario por su valor pedagógico, ya que por primera vez se da importancia a los dibujos para llegar a un mejor entendimiento del texto, orientado en este caso a la enseñanza del latín. Comenius, reconocido en la actualidad como el padre de la pedagogía, estaba convencido de que a los niños había que mostrarles a través de imágenes lo que se les enseñaba con palabras.
En la Época Moderna muchos artistas han reanimado el arte de la ilustración siguiendo los movimientos y tendencias artísticas del momento. Desde el siglo XVIII muchos pintores e impresores, la mayoría franceses, han ilustrado libros de fábulas, cuentos, anatomía, ciencia, naturaleza y Botánica.
Thomas Bewick (1753 -1828) Ornitólogo y grabador xilógrafo inglés. Descubrió un nuevo tratamiento: la xilografía a contrahilo o a contrafibra, que permitía más detalle en la ilustración y más duración de las planchas de impresión. Gracias a su conocimiento de los hábitos de los animales obtenido durante sus salidas al campo, Thomas Bewick ilustró sus Select Fables (1784), que contenían grabados técnicamente muy superiores a cualquier otro realizado hasta el momento. También realizó libros Muy populares entre los niños ingleses: A General History of Quadrupeds (1790), y su gran obra, The History of British Birds en dos partes, Land Birds (1797) y Water Birds (1804). En 1818 ilustra las Fábulas de Esopo.
William Blake (1757 -1827), poeta, pintor y grabador inglés, creador de una forma de poesía única acompañada de ilustraciones. (Cantos de inocencia (1789) y Cantos de experiencia (1794)). William Blake adornó los Cantos con dibujos basados en visiones fantásticas de rico simbolismo, que requieren grandes dosis de imaginación por parte del lector, debido a la complejidad de las relaciones entre dibujo y poesía, pero inseparables para poder apreciar correctamente su obra. Se desconoce el método que utilizaba para la estampación, pero lo más probable es que primero escribía el texto y después grababa los dibujos de cada poema sobre una plancha de cobre, usando algún líquido insensible al ácido, por lo quedaban en relieve cuando se aplicaba. Entonces, le daba una capa de tinta de color, lo estampaba, y retocaba los dibujos a mano con acuarela.
Boucher &Frogonard (Ilustradores franceses, siglo XVIII) Honoré Daumier (siglo XIX) Jean Gigoux (siglo XIX) William Morris (siglo XIX-XX) Gustave Doré (siglo XIX) Ilustrador de Inferno y La divina Comedia Dante, Rime of the. Ancient. Mariner, Perrault´s. Fairy Tales etc. Ilustradores coleccionables de libros infantiles del presente
La Época Victoriana en Inglaterra y siglo XIX en general es el verdadero clímax de la ilustración en los libros. Debido a la industrialización e introducción de nuevas técnicas en la producción los libros pasan de ser un artículo de lujo a poder ser consumidos por un publico con menores recursos económicos y nivel cultural. Se ve como se introduce el color en las ilustraciones ( en un comienzo a mano) lo que facilita la aparición del llamado "Picture Book", que se compone en su practica totalidad de imágenes. La aparición de los folletines o seriales también facilita la aparición de unos nuevos artistas, los caricaturistas, que como Georges Cruikshank, también son ilustradores de libros. Otros ilustradores famosos de la época son: • Tenniel • Doyle • Enrico Mazzanti • M. L. Atwell
En el Siglo XX las nuevas tecnologías hacen posible la producción de libros ilustrados a muy bajo coste y facilitan la introducción de la fotografía como ilustración. Este abaratamiento paradójicamente, provoca la aparición del libro ilustrado de lujo, en el que las ilustraciones son mucho más cuidadas y artesanales, soliendo ser realizadas por artistas de renombre como por ejemplo en los libros ilustrados con acuarelas o grabados. Algunos ilustradores importantes de la época son: • Rackham • Dulac • Nielsen
Tipos de Libros • Tres dimensiones
Tipos de Libros Tres dimensiones
Tipos de Libros Tres dimensiones
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Tipos de Libros • Diseños originales
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Tipos de Libros Original
Tipos de Libros • Originales
Tipos de Libros • Pop Up
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Tipos de Libros • Troquelados
Tipos de Libros Troquelados
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Tipos de Libros Polípticos
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Tipos de Libros Marcador de libros
Nuestro Libro • 10 a 12 carillas (sólo ilustraciones sin fotos) que contengan: • 1 carátula (Título y créditos) • 1 página de más de dos carillas • 1 pop up • 1 infografía • 1 página troquelada • 1 marcador de páginas (adicional) • Ilustrar un libro de Antonio Paredes Candia • Imprimir a colores en papel fotográfico • Elaborar las páginas a color con 300 DPI • Formato 21 x 27 cms. • Posición vertical • Trabajar con illustrator y photoshop • Elaborar una maqueta (dummy) • Entrega en disco (illustrator, photoshop y PDF) • Entrega de trabajos después de 8 clases de 3 horas cada sesión
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