la suerte que llego a mi vida Carolina

* la suerte que llego a mi vida

Carolina tenía como costumbre salir todas las tardes de su casa para ir al parque a jugar , ella gastaba toda su tarde pues llegaba casi al anochecer su madre muy preocupada no quería que salga , siempre la regañaba ella por su parte no le importaba , se divertía jugando sola ya que no tenia amigos. Desde pequeña le pedía a su madre un hermanito pero ella era soltera y no quería una pareja.

Paso el tiempo Carolina seguía creciendo sin amigos ni amigas, ella se sentía muy sola ; su madre no se preocupaba por lo mucho que sufría su hija con esta situación, mucho menos quiso comprarle una mascota pues no le gustaban los animales.

Una noche muy fría cuando Carolina regresaba a casa escucho un ruido muy extraño esto le causo miedo pero al mismo tiempo curiosidad ella decidió acercarse y encontró una caja al abrirla de repente encontró tres perritos que parecían que hace poco los habían separado de su madre ; dos de ellos estaban muertos y uno se encontraba vivo.

Carolina miró aquel perrito que estaba vivo y sintió como su corazón se estremeció y comenzó a llorar , muy decidida lo tomo y lo llevó a su casa ; lo baño , lo alimento y lo lleno de mucho amor decidió llamar a su nuevo amigo Suerte.

Lo tubo escondido por varios días en su habitación sin que su madre se diera cuenta , pero los días se hicieron meses y suerte creció pero a pesar de su enorme tamaño este animalito llenaba de alegría la vida de Carolina.

Sus travesuras así como le causaban enojo y preocupación porque su madre lo descubra siempre lograban sacar una enorme sonrisa en ella , pues suerte procuraba hacer sus travesuras con las cosas de su madre pero tal era el ingenio de Carolina que nunca nadie se dio cuenta de nada.

Hubieron días en que se comía los zapatos , otras en donde se orinaba por doquier y también se comía la tarea de Carolina, por eso sin importar nada su amor iba creciendo más y más , incluso dejo de ser una niña triste y sola, pues lo tenia a el su mejor amigo.

Pero un día como cualquiera Carolina muy temprano fue al colegio olvidándose de cerrar la puerta de su habitación , Suerte salió y como era un perrito muy inquieto la madre de Carolina lo encontró haciendo sus travesuras en la sala.

A la madre de Carolina no le gustaban los perros , los consideraba animales desagradables y pulgosos como ella decía, lo mando sacando de su casa dejando a Suerte en la calle y como era de esperarse el amigo de Carolina se perdió.

Cuando Carolina regreso del colegio tan emocionada por ver a su amigo se llevo una enorme sorpresa pues Suerte ya no estaba y ella muy disgustada le reclamó a su madre por su mascota al enterarse que su madre lo había sacado a la calle

Ella le confesó a su madre que, aquel perrito que encontró en la sala , lo llevaba criando por varios meses, entonces su madre se lleno de furia por que ahora todo tenía sentido acerca de las travesuras ocurridas.

Su madre le dijo que mejor se olvidara de suerte, que jamás iba a regresar, Carolina lloraba y al mismo tempo tenía rabia pues ella dijo que él había estado mucho más tiempo con ella que su madre misma.

Se lleno de mucha tristeza pues las sonrisas que suerte había dejado se desvanecieron ; Carolina no quería comer ni dormir permaneció en su habitación llorando desconsoladamente por varios días.

No quería ir al colegio , cada día que pasaba era una pesadilla pues su madre no lograba comprender su llanto ni su tristeza e incluso Carolina la llegó a odiar , pues para su madre era mucho mejor que se olvidara de aquel animal.

Mantenía la esperanza de que Suerte volviera y con el paso de los días él no regresaba su madre no comprendía la importancia que suerte tenia en la vida de su hija y pensaba que solo era un capricho de una niña que algún día se olvidaría

Una tarde lluviosa, su madre salió de compras muy tranquila, ero al regresar a su casa , se encontró con dos hombres armados querían robarle, y como enviado del cielo Suerte se apareció y comenzó a ladrar tan fuerte que los ladrones salieron corriendo.

Su madre llena de lagrimas, no podía creer aquel acontecimiento, pues se dio cuenta que Suerte salvo su vida, entonces se arrepintió y comprendió el daño que le estaba haciendo a su hija con su actitud tan malvada.

En plena tormenta miro a Suerte fijamente, su cuerpo se estremeció al mirar lo flaco y cansado que el pobre estaba por los días que llevaba sin comer, y se arrepintió , lo tomo en sus brazos y lo llevo a casa para poder reanimar a su hija.

Al llegar a casa Carolina aun se encontraba en su cama llorando, su madre la llamo , pero ella no le respondió, entonces entró a su cuarto con Suerte, Carolina no podía creer lo que estaba pasando, lo abrazo tan fuerte y exclamo: !es un milagro!.

Le pregunto a su madre lo que había pasado y ella con lagrimas en los ojos le pidió perdón y la abrazo, Carolina muy contenta le preguntó ¿me puedo quedar con Suerte? Y ella le respondió claro hija te puedes quedar con el porque en realidad este pequeño es una suerte en nuestras vidas. FIN