La juventud confronta sus pecados ocultos Pr 28

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La juventud confronta sus pecados ocultos. Pr. 28: 13; Salmo 32: 1.

La juventud confronta sus pecados ocultos. Pr. 28: 13; Salmo 32: 1.

Verdad bíblica: • La Palabra de Dios nos enseña que la paga del pecado

Verdad bíblica: • La Palabra de Dios nos enseña que la paga del pecado es muerte, pero quien confronta y confiesa su pecado, Dios es fiel y justo para perdonarlo.

Verdad bíblica aplicada: • Fraternidad juvenil, la Biblia es espada de dos filos que

Verdad bíblica aplicada: • Fraternidad juvenil, la Biblia es espada de dos filos que penetra el alma, hoy te exhorta para que enfrentes y confieses a Dios el pecado que te asedia.

1. Confronta tus pecados ocultos. Confronta tu corazón. (Mt. 15: 19; Jer. 17: 9;

1. Confronta tus pecados ocultos. Confronta tu corazón. (Mt. 15: 19; Jer. 17: 9; Joel. 2: 13 • Confrontar significa enfrentar o poner frente a frente, esto es, resistir, oponerse, no ceder a un impulso o deseo, aguantar, soportar, sufrir.

1. Confronta tus pecados ocultos. Confronta tu corazón. (Mt. 15: 19; Jer. 17: 9;

1. Confronta tus pecados ocultos. Confronta tu corazón. (Mt. 15: 19; Jer. 17: 9; Jl. 2: 13 • Deseo recordarte que todos los pensamientos que tengas son muy importantes, tan importantes que literalmente puedes trazar el camino de tu vida de éxito o de fracaso. Los pensamientos provienen de tu corazón, esto es, lo que realmente deseas proviene de lo profundo de tu ser, si deseas dinero o poder, amor o concupiscencia, vivir en desenfreno o vivir en santidad e integridad, todo esto es lo que en el fondo tú estas deseando, es en lo que estás pensando, y es en lo que te convertirás; en lo que piensas, eso harás. Si tienes una idea en tu mente y corazón el tiempo suficiente, acabarás por hacerla, eso es de ley, no puedes engañarte. Es por esto, que Dios nos manda que guardemos nuestro corazón (Pr. 4: 23), nuestra mente; nos ordena: “deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar”; y sigue diciendo, porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos”.

II. Confesión y anhelo de apartarte de tus pecados ocultos (Is. 1: 18; Jn.

II. Confesión y anhelo de apartarte de tus pecados ocultos (Is. 1: 18; Jn. 1: 9) • El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. (Pr. 28: 13) • Por tanto, confesaré mi maldad, y me contristaré por mi pecado dice el Salmo 38: 18 • Necesitas a nuestro Señor Jesucristo para que te limpie de toda maldad, su sangre vertida en la cruz del Calvario tiene poder para limpiarte de todo pecado, sea este oculto o no, pero: “No que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, si no que nuestra competencia proviene de Dios. (2 Co. 3: 5), con esto, no estoy diciendo que reprimas tus pensamientos pecaminosos, ya que de una forma u otra saldrá a la luz, ya sea en depresión, en temor, ansiedad, melancolía, persecución o culpabilidad, cualquiera de estas manifestaciones son peligrosas por que llevan a tu alma a esclavitud; sin embargo, cuando lo confiesas y anhelas de todo corazón apartarte de ellos, la Palabra de Dios te dice: Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros, esto es, que nuestro Señor Jesucristo tome el control de tus pensamientos y sentimientos, de tu vida entera. Debes deliberadamente, firmemente y determinadamente, es pues, que tendrás la plena certeza de que nuestro Señor Jesucristo es suficiente para perdonarte.

III. Seguridad del perdón de Dios (Sal. 25: 7; Ro. 4: 7). • “De

III. Seguridad del perdón de Dios (Sal. 25: 7; Ro. 4: 7). • “De los pecados de mi juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes, conforme a tu misericordia acuérdate de mi, por tu bondad, oh Jehová” (Sal. 25: 7). • Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades son perdonadas, y cuyos pecados son cubiertos (Ro. 4: 7). Cuando tienes la seguridad del perdón, entonces tienes que tener tus pensamientos ocupados, ya que, si se vuelven a llenar de música, revistas, libros, practicas, Internet, juegos virtuales mundanos, etc. , tu postrer estados será peor que el primero, tú lo sabes, pues el enemigo de nuestras almas vendrá con todo para hacer caer aún más bajo. De tal manera que, mantén tus pensamientos con la Palabra de Dios, que la Biblia sea, ahora la que rija tu vida, recuerda que es un punto doctrinal maravilloso, en el cual, nuestra iglesia se fundamenta, es pues, la Biblia, la Palabra de Dios, la única regla de nuestra fe, y a la que se debe ajustar nuestra vida. . ¿con qué debe un joven, señorita, como tú, limpiar su camino? Sé que tú tienes la respuesta, búscala, ponla en acción y entonces sabrás que “Todo lo puedes en que Cristo que te fortalece. ”

CONCLUCIÓN: • El pecado es execrable, aborrecible, esto es, reprobable, abominable para Dios quien

CONCLUCIÓN: • El pecado es execrable, aborrecible, esto es, reprobable, abominable para Dios quien es Santo; la Biblia claramente nos dice en el Salmo 103: 3 “Jehová, si mirares a los pecados, ¿Quién, oh Señor, pondrá mantenerse? Y en el evangelio de Mateo 7: 21 -23 dice: “Porque de dentro, del corazón del hombre, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez, todas estas maldades de dentro salen, contaminan al hombre. ” También la Biblia dice: “Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios. ” (Mt. 5: 8) y sigue diciendo: “Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia” (Ro. 6: 14), “ El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. Todo aquel que es nacido de Dios” 1 Jn. 3: 8 -9) “Sabemos que todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, pues aquel que fue engendrado de Dios le guarda, y el maligno no le toca” (1 Jn. 5: 18) Es entonces que estamos seguros en la mano poderosa de nuestro Dios y estamos seguros que “de los pecados de mi juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes, conforme a tu misericordia acuérdate de mí, por tu bondad, oh Jehová” (Sal. 25: 7). Fraternidad juvenil, Dios es Fiel y por su bondad y misericordia, si tú así se lo pides, te limpia, te regenera, te justifica, te santifica.