LA DECISIN DE QUERER El ser humano tiene

LA DECISIÓN DE QUERER

El ser humano tiene INTELIGENCIA y VOLUNTAD. El amor es un afecto que depende de nuestra inteligencia, y de nuestra voluntad. El amor depende de la VOLUNTAD de QUERER. Yo Quiero Querer al otro. - Novios: Me caso porque te quiero. - Esposos: Te quiero porque me casé contigo. ¡QUERER!

10 Consejos para refrescar nuestro amor

1. Recordar el “¡SÍ, QUIERO”! Tener la seguridad que se puede tener un matrimonio feliz, siendo realistas, es decir, dentro de nuestros límites humanos. Es importante la actitud: • Estar decidido a que nuestro amor sea duradero y no desechable. • Saber que podemos volver a mirarnos a los ojos y re comenzar. • Convencerse que el matrimonio es un camino; No algo que está hecho. • Decidirnos a querer.

2. Conocer al otro Para los hombres es fundamental sentirse necesarios. • No sentirse necesitado, es una muerte lenta para el hombre. • Si el hombre no se siente necesario, busca fortalecer su autoestima en otras partes. • La mujer debe ser consciente de esta necesidad profunda del hombre de sentirse necesitado, valorado, apreciado, reconocido, solicitado. • No descalificarlo ni burlarse de él (menos en público); pedirle ayuda en muchas cosas; reconocer su capacidad; hacerle sentir que es muy necesaria su presencia; decirle que se le echa de menos…

2. Conocer al otro Las mujeres desean sentirse queridas. • Si la mujer no se siente querida, se desanima y se cuestiona si no se está dando ella demasiado. • La mujer que no se siente querida por su marido, busca satisfacer sus necesidades afectivas en los hijos, en la infidelidad -física o psicológica- o en la amistad con otras mujeres. Se rompe poco a poco la comunicación que es base de toda relación. • El hombre debe saber esto; o hay que hacérselo saber.

3. Tú eres lo más importante Muchos problemas matrimoniales son consecuencia de no vivir una sencilla regla: “poner al otro antes que uno mismo”. A menudo las parejas son muy generosas con sus amigos, pero no ponen la misma energía cuando se trata de la relación con su cónyuge.

4. Quiero estar contigo • Pasar mucho tiempo juntos. Poco tiempo pero de calidad: Falso! Meta: mucho tiempo y de calidad. • No tener vidas paralelas. NO terminar siendo “socios” de una empresa común: la familia. • Buscar lo que une. ¿Qué hacíamos de novios?

5. Quiero amarte en tu totalidad “La unión conyugal que físicamente se expresa en un contacto íntimo de las partes diferenciales del sexo, la ha puesto Dios de esta manera para materializar el ansia de entrega total que lleva a uno a introducirse en el otro, vivir en el otro y. . . ser el otro”. Antonio Vázquez, Escenas de Matrimonio, Sexualidad Humana.

5. Quiero amarte en tu totalidad Que la relación sexual ENRIQUEZCA Tu relación matrimonial • El círculo virtuoso: Acto sexual donativo y receptivo -> unión esposos Buena relación entre esposos -> buen acto sexual • Valorar y cuidar la intimidad conyugal • Sin ansiedad. Es un proceso.

5. Quiero amarte en tu totalidad “Lo que marca la diferencia entre el sexo antes del matrimonio y aquel entre esposos, es el contexto: en este último hay una entrega total, mutua, no hay comparaciones, no se tiene miedo al abandono y se disfruta plenamente”. Mary beth Bonacci, conferencista norteamericana sobre sexualidad.

5. Quiero amarte en tu totalidad ¡Falso que el matrimonio arruine la sexualidad de la pareja por volverla FOME, rutinaria… Lo que la arruina es el egoísmo. En la ternura y donación MUTUA están las claves.

6. Mirar al otro (no pal’ lado) • Fidelidad gruesa: no exponerse a situaciones de riesgo. • Fidelidad fina: cuidar la intimidad, no ridiculizar, no criticar.

7. La importancia de los detalles • • • Compartir cada día Darle al otro pequeños gustos Construir ritos familiares Tener buen humor Tratarse bien Generoso(a) en los halagos

8. Ser amigos que conversan • Hablen los dos: El diálogo matrimonial no puede servir sólo para que uno se desahogue o se exprese. Ambos tienen que participar y aportar. Al que le cuesta menos conversar debe esforzarse por darle tiempo y espacio al otro para que hable. Y cuando lo haga, oír con atención. • No des consejos si no te los piden: Si tu cónyuge te está contando un problema, no te apures en ofrecerle soluciones. Lo que quiere, en primer lugar, es comprensión. Ofrecer rápidamente una solución es como si le estuvieras diciendo: “no es para tanto, simplemente podrías… La comprensión debe preceder al consejo. • Muestra interés sincero: No te distraigas. Concéntrate en tu pareja. Haz preguntas, míralo a los ojos, asiente con la cabeza, tómale una mano. . • Comunica tu comprensión: hazle saber que lo entiendes, que eres capaz de ponerte en su situación, de sufrir y gozar con él/ella. Una buena frase es: “Te entiendo perfectamente”. Sé solidario. Lo que busca es apoyo emocional, no juicios o consejos. • Expresar afecto: un “te quiero” o un abrazo a veces valen más que mil palabras.

8. Ser amigos que conversan LOS ENEMIGOS DEL DIALOGO El cansancio, la rabia, el resentimiento, la prisa hacen que estos cuatro enemigos del diálogo aparezcan cuando menos se espera. • La crítica: cuando una pareja se quiere, corrige en el otro el defecto sin atacar a la persona y en el momento y el lugar oportunos. Eliminar frases como “tu siempre. . . ” “¿porqué eres así? ¡nunca vas a cambiar! ¡estás igual que tu mamá! La “bruja criticona” y el “marido descalificador” destruyen cualquier posibilidad de diálogo. El mejor antídoto: buscar los positivo en el otro, comprender, disculpar. • El desprecio: burlarse públicamente del otro, contar algo de su intimidad o criticarlo ante los demás, son síntomas de que algo anda mal. El respeto es la base de la comunicación, y sin él, es prácticamente imposible hablar de verdad. • Estar a la defensiva: nadie puede conversar con un puercoespín que, ante el mínimo movimiento, pincha. La actitud defensiva suprime el diálogo –el otro se aburre de intentar conversar- y agrava los conflictos. • La indiferencia: no interesarse de verdad por el otro –su vida, sus preocupaciones, sus cansancios, sus triunfos- es la mejor manera de matar el amor. Y la indiferencia se nota en los gestos, la falta de atención-. ¿Quién está dispuesto a sentarse a conversar con una estatua de hielo?

9. Ser amigos que perdonan • Hablar: Cuando las discusiones se traducen en días de silencio, en un amurramiento continuo, en esperar que el otro ceda… lo único que sucede es que se agranda aquello por lo que se peleó. • Perdonar: Algunas heridas toman más tiempo en cerrarse que otras, pero los rencores y resentimientos sólo alejan el amor. Pide perdón. • Pedir ayuda a Dios para perdonar y olvidar. Piensa en todo lo bueno del pasado y vive el día presente. No acumules una lista de agravios.

10. Apuesta por el amor En todo matrimonio hay momentos difíciles que son completamente normales, parte del proceso de maduración de la vida de la pareja. El remedio no es la separación, sino la LUCHA por re encantarse. Vuelve a apostar por el AMOR. Si es necesario, busca AYUDA. Decídete a QUERER. http: //www. youtube. com/watch? v=OFmw 91 X 2 Qh. A

Dios es parte de nuestro matrimonio • No nos faltará la ayuda de Dios. • Los matrimonios son hoy testimonio -sobre todo para los hijos y la juventud- de que el amor verdadero, bueno y bello es posible entre nosotros. • Pidamos todos los días ayuda a Dios para que nuestro matrimonio sea imagen del amor de Dios. • Pide a Dios por tu marido, por tu mujer: que te enseñe a quererlo, a quererla, con amor verdadero, que sabe darse totalmente al otro.

Buenas ideas… • Salidas frecuentes: Dedícale tiempo. • Oír y escuchar: Óyelo, Mírale a los ojos. • Como novios: Conquístalo a diario. Cuida el arreglo personal. • Buenos recuerdos: Recuerda los momentos felices compartidos. • Házle sentir que le necesitas. Busca su compañía. • No lo o la critiques ante otros, menos cuando no está presente. • Sorprende con detalles inesperados. • Venía pensando en ti: Búscale al llegar. Dale un beso al despedirte. • Quiero estar contigo: Prefiérele antes que a las amistades.