Imitadores de Jess tercera parte Aqu est la

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Imitadores de Jesús tercera parte Aquí está la paciencia de los santos, los que

Imitadores de Jesús tercera parte Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.

En esta parte estudiaremos la fe del Modelo por excelencia: Jesús.

En esta parte estudiaremos la fe del Modelo por excelencia: Jesús.

A la edad de doce años dijo: “En los negocios de mi Padre me

A la edad de doce años dijo: “En los negocios de mi Padre me conviene estar” (Lucas 2: 49). “Cuando Jesús vino a la tierra y mientras andaba entre los hombres, fue guiado paso a paso por la voluntad de su Padre, que le era manifestada día tras día” (DTG 120 -121). Durante sus 33 años de vida estuvo dedicado a hacer la voluntad de Dios.

“Tenemos el privilegio de vivir una vida consagrada diariamente al Padre así como lo

“Tenemos el privilegio de vivir una vida consagrada diariamente al Padre así como lo hizo Cristo, y de ser guiados en el cumplimiento de la parte que nos ha asignado en su gran plan” (DTG 179; Juan 15: 10). “Si guardáis mandamientos, permaneceréis en mi amor; como también yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor” Para tener “La fe de Jesús” es indispensable obedecer los Mandamientos de Dios, tal como Él los escribió en Éxodo 20: 3 -17.

“En los negocios de mi Padre me es necesario estar” Jesús siempre había sido

“En los negocios de mi Padre me es necesario estar” Jesús siempre había sido leal al deber, siempre había cumplido fielmente todas las tareas que se le habían asignado. Aún siendo niño, Jesús ya comprendía que no debía hacer su propia voluntad, sino la voluntad de su Padre celestial. Entonces descendió con ellos a Nazaret, y estaba sujeto a ellos (Lucas 2: 51).

Juan 6: 38. Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino

Juan 6: 38. Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.

He descendido del cielo no para hacer mi voluntad sino la voluntad de mi

He descendido del cielo no para hacer mi voluntad sino la voluntad de mi Padre Aquí se la ve desde el ángulo del acontecimiento específico del nacimiento de Jesús entre los hombres, y también se abarca el resultado de aquel suceso tal como se ve en su ministerio y presencia permanente. Desde Belén hasta la cruz, siempre hizo la voluntad de su Padre.

No para hacer mi voluntad La completa sumisión de Jesús a su Padre es

No para hacer mi voluntad La completa sumisión de Jesús a su Padre es para los creyentes una seguridad de que todo lo que Jesús hace para ellos tiene su origen en el amante corazón de Dios. De la misma manera, desde el momento en que nos entregamos a Cristo, nuestra vida debe ser diferente, no para hacer nuestra voluntad, sino la voluntad de Dios expresada en su Santa Ley.

Las palabras de Cristo demuestran la falsedad de la opinión de que Dios está

Las palabras de Cristo demuestran la falsedad de la opinión de que Dios está airado con el hombre y que la salvación de los pecadores se basa en que Cristo ha apaciguado la ira del Padre. El ministerio de la vida de Jesús y su muerte por el hombre fueron más bien expresiones del amor de su Padre. “Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino tenga vida eterna” (Juan 3: 16). Lo que debiéramos padecer usted y yo por nuestros pecados, lo padeció Él.

…. Y puesto de rodillas oró Diciendo: “Padre, si quieres, pasa de mí esta

…. Y puesto de rodillas oró Diciendo: “Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya” (Lucas 22: 41 -42). El Padre está al lado de cada alma que lucha Cristo venció con la fortaleza divina, y así debe vencer cada alma tentada.

Dios estaba con Cristo en el huerto de Getsemaní, y por lo que experimentó

Dios estaba con Cristo en el huerto de Getsemaní, y por lo que experimentó Cristo debemos aprender a confiar en nuestro Padre celestial. En todo momento y en todo lugar debemos creer que él es tierno, fiel y leal, capaz de guardar lo que se ha confiado a su cuidado. En la lucha agonizante de Cristo -nuestro Sustituto y Garantía- el Padre estuvo al lado de su Hijo, y está al lado de cada alma que lucha con el desánimo y las dificultades (Carta 106, 1896).

Todo depende de la forma en que digamos: «Hágase tu voluntad. » (i) Puede

Todo depende de la forma en que digamos: «Hágase tu voluntad. » (i) Puede decirse en un tono de resignación impotente, como el que se sabe en las garras de un poder contra el que no puede luchar. Esas palabras pueden indicar la muerte de la esperanza. (ii) Puede decirse como si uno hubiera llegado a una rendición total, en reconocimiento de una derrota completa. (iii) Puede decirse en un tono de frustración porque el sueño que se esperaba no se va a realizar. Estas palabras pueden ir cargadas de desilusión y hasta rabia, porque no hay nada que se pueda hacer. (iv) Puede decirse con el acento de una confianza perfecta. Así es como lo dijo Jesús. Estaba hablando con Uno que es un Padre, con un Dios cuyos brazos eternos le sostenían y rodeaban aun en la cruz. Se sometía, pero a un amor que no le dejaría. Lo más difícil de la vida es aceptar lo que no podemos entender; pero hasta eso lo podemos hacer si hemos recibido en Cristo la seguridad del amor de Dios.

“Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se

“Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lucas 19: 10). Pero Jesús no sólo vino a rescatar al hombre, sino también a todo lo que se perdió por causa del pecado del hombre. Note que Jesús, nuestro Modelo, expuso du vida para salvarnos, por tanto, es imposible no seguir su ejemplo ante semejante sacrificio.

El mundo será restaurado a su hermosura edénica y será habitado por una raza

El mundo será restaurado a su hermosura edénica y será habitado por una raza sin pecado, y todo lo que se había perdido también será renovado “en los tiempos de la restauración de todas las cosas” (Hechos 3: 21).

¿Qué pedido hace Cristo a los que tienen “la fe de Jesús”? Juan 14:

¿Qué pedido hace Cristo a los que tienen “la fe de Jesús”? Juan 14: 1 -3 “No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas mansiones hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho. Voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo; para que donde yo estoy, vosotros también estéis”

“Si me fuere”. O ”Cuando haya ido” como lo traduce la (Biblia de Jerusalén)

“Si me fuere”. O ”Cuando haya ido” como lo traduce la (Biblia de Jerusalén) , y os prepare lugar Vendré otra vez. Claramente, se hace referencia al advenimiento personal de Jesús descrito vívidamente unos pocos días antes en respuesta a la pregunta: “¿Qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo? ” (Mat. 24: 1 -3)

¿Cuál es el objeto de su venida? Os tomaré a mí mismo ”Os tomaré

¿Cuál es el objeto de su venida? Os tomaré a mí mismo ”Os tomaré conmigo” (BJ). Allí se cumplirá (Mat. 24: 40). Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado: Únicamente los que tuvieron la “paciencia de los santos, guardaron los mandamientos de Dios y tuvieron la fe de Jesús, ”, serán llevados al cielo.

“Para que donde yo estoy vosotros también estéis” Se indicó a los discípulos el

“Para que donde yo estoy vosotros también estéis” Se indicó a los discípulos el tiempo del segundo advenimiento como la ocasión cuando se reunirían con su Señor. No hay aquí ninguna insinuación que apoye la doctrina popular de que los creyentes van a estar con su Señor en el momento de su muerte, ni en ninguna otra parte de las Escrituras esta doctrina recibe apoyo. Pablo también dirigió la atención de los creyentes a la ocasión del segundo advenimiento como el momento de la magna reunión (Lea 1 Tesalonicenses 4: 16 -17). Solamente entonces estaremos con él Señor.

¿Qué esta esperando el Señor para este magno acontecimiento? Está esperando con deseo anhelante

¿Qué esta esperando el Señor para este magno acontecimiento? Está esperando con deseo anhelante la manifestación de sí mismo en su iglesia. Cuando su imagen sea perfectamente reproducida en los suyos, entonces él vendrá (PVGM 47). Tenemos el privilegio de apresurar el día del glorioso encuentro en el hogar (2 Pe. 3: 12; DTG 586 -588; PVGM 47)

Juan 13: 15. “Porque ejemplo os he dado, para que también vosotros hagáis como

Juan 13: 15. “Porque ejemplo os he dado, para que también vosotros hagáis como yo os he hecho” Aunque esta orden de que “como él lo ha hecho, nosotros también lo hagamos”, se refiere al lavamiento de los pies, bien podemos aplicarlo a seguir su ejemplo en todo. 1). Ocuparnos en los “asuntos de nuestro Padre celestial” 2). Que aún en los momentos más difíciles de la vida, digamos “no se haga mi voluntad, sino la tuya”.

Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas – el amor al

Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas – el amor al dinero -, y corre en busca de la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre. 1 Tim. 6: 11. Huye de estas cosas Es decir, ni aun te detengas para pensar en las ventajas de la seguridad material. La única seguridad del que tiene “la fe de Jesús” está en un programa indiviso que no le permita dedicar tiempo a la adquisición de riquezas.

Pelea la buena batalla de la fe; echa mano de la vida eterna, a

Pelea la buena batalla de la fe; echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo eres llamado, habiendo hecho buena profesión delante de muchos testigos. (1 Tim. 6: 12). En vez de dedicar su energía y tiempo a buscar riquezas, el cristiano debe emplearlos en la adquisición de las virtudes cristianas. Dios ha prometido suplir nuestras necesidades materiales si primero le servimos a él. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas (Mat. 6: 33).

Pelea la buena batalla de la fe Pablo frecuentemente compara la vida cristiana con

Pelea la buena batalla de la fe Pablo frecuentemente compara la vida cristiana con los concursos de atletismo familiares a los habitantes del Asia Menor. ¿De qué dependía la victoria? La victoria era el resultado de una perseverancia resuelta y de un rígido dominio propio.

Una vez que empezaba la carrera no había tiempo para asuntos colaterales ni intereses

Una vez que empezaba la carrera no había tiempo para asuntos colaterales ni intereses divididos. Un corredor tampoco se detiene en la mitad de su carrera para jactarse de lo bien que está corriendo (Lea 1 Co. 9: 25).

La batalla de fe Es decir, la revelación cristiana del Evangelio. Ante todas las

La batalla de fe Es decir, la revelación cristiana del Evangelio. Ante todas las religiones rivales del mundo, el cristiano – o sea, el que tiene “la fe de Jesús”, defiende el Evangelio en dos formas: 1). Mediante una vida cristiana consecuente y 2). Con una presentación lógica y sólida de la verdad cristiana.

Echa mano de la vida eterna Es decir, continúa peleando para poder aferrarse de

Echa mano de la vida eterna Es decir, continúa peleando para poder aferrarse de la recompensa de “la vida eterna”. Pablo contrasta la recompensa que recibirán los que sin reservas van en pos de una vida santificada, con la paga de “destrucción y perdición”, que se dará a los que tuvieron la seguridad material como la meta de su tiempo y energía. Solamente habrá dos opciones: “Salvación” para los que creyeron en Jesús, y “perdición” para los que no creyeron en Él (Juan 3: 16).

De esa manera todo hombre es llamado a heredar “la vida eterna” sin embargo,

De esa manera todo hombre es llamado a heredar “la vida eterna” sin embargo, las estipulaciones de la salvación sólo se conceden a los que son fieles a la forma de vida que Dios indica. “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado” (Marcos 16: 15, 16).

Y desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los

Y desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los valientes lo arrebatan (Mateo 11: 12). Nadie entra en el Reino deslizándose, que el Reino sólo les abre sus puertas a los que están dispuestos a hacer tan gran esfuerzo para entrar como los soldados que están asaltando una ciudad. Sólo el que lo tome desesperadamente en serio, sólo uno en quien la violencia de su total consagración corresponda y derrote a la violencia de la persecución conseguirá entrar en Mi Reino. »

“He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu

“He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona” (Apoc. 3: 11). Fieles mayordomos de nosotros mismos ¡Oh, cuántos han caído porque confiaron en su profesión para la salvación! ¡Cuántos se pierden por su esfuerzo de mantener su reputación! Si uno tiene la reputación de ser un evangelista de talento, un predicador bien dotado, un hombre de oración, un hombre de fe, un hombre especialmente consagrado, hay un positivo peligro de que naufrague en la fe cuando sea puesto a prueba por las pequeñas vicisitudes que Dios permite que sobrevengan. Con frecuencia su gran empeño será mantener su reputación.

El que vive temiendo que otros no aprecien su valor, está perdiendo de vista

El que vive temiendo que otros no aprecien su valor, está perdiendo de vista a Aquel que es el único que nos hace dignos de glorificar a Dios. Seamos fieles mayordomos de nosotros mismos. Desviemos nuestra vista del yo y fijémosla en Cristo, -eso es ser un mayordomo fiel-. Entonces no habrá la más mínima dificultad. Toda la obra hecha, no importa cuán excelente parezca, no tiene valor si no se hace en el amor de Jesús. Uno puede pasar por todo el ciclo de la actividad religiosa; pero a menos que Cristo esté entretejido en todo lo que dice y hace, estará trabajando para su propia gloria (Carta 48, 1903).

Josúe 1: 9. “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no

Josúe 1: 9. “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo dondequiera que vayas” Los que están dispuestos a caminar por la senda que Dios les ha señalado, tendrán un consejero cuya sabiduría está muy por encima de cualquier sabiduría humana.

Romanos 13: 11 -14. “Y esto, conociendo el tiempo, que ya es hora de

Romanos 13: 11 -14. “Y esto, conociendo el tiempo, que ya es hora de despertarnos del sueño; porque ahora está más cerca nuestra salvación que cuando creímos. La noche está avanzada, y el día está por llegar; desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de luz. Andemos honestamente, como de día; no en desenfrenos y borracheras; no en lujurias y lascivias, ni en contiendas y envidias. Mas vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para satisfacer los deseos de la carne”.

Los creyentes de Roma no podían menos que comprender el tiempo crítico en que

Los creyentes de Roma no podían menos que comprender el tiempo crítico en que vivían. Por eso Pablo los exhorta a abandonar toda tibieza e indolencia, a terminar con toda complacencia propia y a vestirse “del Señor Jesucristo”. Pablo les dice: “Es ya hora De levantarnos del sueño” El apóstol Pablo dijo esto aproximadamente en el año 58 d. C. ¿Qué nos diría ahora cuando faltan solo 19 años para que se cumpla la profecía de los 6. 000. años de pecado que se cumple aproximadamente en el año 31? La preparación necesaria para el gran día de Dios exige de los cristianos –que tienen “la fe de Jesús” hoy-una continua vigilancia.

“porque ahora está más cerca nuestra salvación que cuando creímos” Por “salvación” Pablo quiere

“porque ahora está más cerca nuestra salvación que cuando creímos” Por “salvación” Pablo quiere significar la venida de Cristo en gloria y poder y todo lo que sucederá entonces: 1) “la manifestación de los hijos de Dios” (Rom. 8: 19). Cuando se verá realmente quienes son. 2). “la redención de nuestro cuerpo” (Rom. 13: 23). Tanto de los muertos en Cristo, como de los santos vivos, cuando seremos transformados, y 3). la liberación de la naturaleza “de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios” (Rom. 13: 21). Se elevarán en las nubes al encuentro del Señor.

Note la urgencia con la que pablo se dirige a la iglesia de hoy:

Note la urgencia con la que pablo se dirige a la iglesia de hoy: “Y esto, conociendo el tiempo, que ya es hora de despertarnos del sueño; porque ahora está más cerca nuestra salvación que cuando creímos. La noche está avanzada, y el día está por llegar” Aquí Pablo se une a las Palabras de Jesús cuando dijo: “Y cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca” (Lucas 21: 28). Observe con cuidado esta imagen con sus fechas, donde los glaciares se han derretido, por el calentamiento global.

La expectativa constante de la venida del Señor es la actitud mental que Cristo

La expectativa constante de la venida del Señor es la actitud mental que Cristo ordenó en sus repetidas advertencias (ver Mat. 24; Luc. 21; Mar. 13). Esta expectativa ha estado condicionada desde el principio con el consejo de que “el día y la hora nadie sabe” (Mat. 24: 36).

Pablo tuvo en cuenta esta precaución (1 Tes. 5: 1 -2). “Pero acerca de

Pablo tuvo en cuenta esta precaución (1 Tes. 5: 1 -2). “Pero acerca de los tiempos y de los momentos, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba. Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá como ladrón en la noche”. Pedro compartía este mismo sentimiento (1 Ped. 4: 7). “Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración” El apóstol Juan: (Rev. 22: 12). “Y he aquí, yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según fuere su obra”. El Espíritu de Profecía: (Ev. 504; HAp 215).

El hecho de que este tiempo se ha prolongado más de lo esperado, no

El hecho de que este tiempo se ha prolongado más de lo esperado, no significa que la Palabra de Dios haya fallado. ¿Entonces porqué Cristo no ha venido? Primero. “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca” 2 Pedro 3: 9. Segundo. Hay una obra que debe ser hecha y hay condiciones que se deben cumplir antes de que pueda venir Cristo (ver Ev 504 -505).

Entre tanto es indispensable que cada creyente experimente un sentimiento continuo y vital de

Entre tanto es indispensable que cada creyente experimente un sentimiento continuo y vital de la brevedad del tiempo y de la inminencia del retorno de Cristo. Esta motivación es indispensable para completar la obra que debe concluirse y hacer frente a las condiciones que se presenten. Permanece siempre intacta la verdad de que a los que duermen en una tibia complacencia propia el día del Señor los sorprenderá como ladrón en la noche, “y no escaparán” (1 Tes. 5: 3).

Finalmente, quiero invitar a mis hermanos que tienen “la fe de Jesús”, a redoblar

Finalmente, quiero invitar a mis hermanos que tienen “la fe de Jesús”, a redoblar la confianza en su misericordia, haciendo la obra que Él nos encomendó: “Id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”.