Hiplito Yrigoyen 12 julio 1852 3 julio 1933

Hipólito Yrigoyen 12 julio 1852 - 3 julio 1933

“Cada vez es más imperioso hacer del ejercicio cívico una religión política, un fuero inmune, al abrigo de toda contaminación, hasta dejar bien cimentadas las prerrogativas inalienables e imprescriptibles de la nacionalidad”. (Mensaje al Congreso Nacional 15 de octubre de 1921).

“Cuando se abriga la fe en la causa por la que se ha combatido, se salva ante todo la fuerza del principio, en la convicción de que horas propicias le darán la victoria; porque los pueblos que llevan en su seno un porvenir grandioso avanzan siempre en las conquistas de sus verdaderos anhelos”. (Nota al Comité Nacional de la U. C. R. , 29 de setiembre de 1897).

“En el gobierno o fuera de él he de contribuir para que bajo la bóveda de nuestro cielo no haya un solo desamparado”. (A la delegación de empleados de comercio e industrias, 8 de julio de 1922).

“La Universidad de Buenos Aires, como las de Córdoba y La Plata, ha recibido el saludable influjo de las nuevas ideas impuestas por el espíritu renovador argentino, de acuerdo con las exigencias y necesidades de la Nación en el orden de las instituciones de enseñanza superior y con los adelantos de la civilización en las distintas manifestaciones de la vida”. (Discurso en el centenario de la Universidad de Buenos Aires, 12 de agosto de 1921).

“Una más amplia distribución de la riqueza, dando a las grandes masas una mayor capacidad de producción y consumo”. (Mensaje al Congreso Nacional, 6 de julio de 1922).

“La tierra pública fue la piedra del escándalo de una época: el país es testigo de su salteamiento. Fue indispensable que el pueblo conquistara al fin su derecho de gobierno, llevando a regir sus destinos a quien encarnara sus nobles aspiraciones, para que recién hubiera un poder tan fuerte como fuera necesario para extirpar al empedernido delito y extinguir la continuación de la rapacería”. (Mensaje al Congreso Nacional, 3 de agosto de 1921).

“Afirmo mi credo americano por la sustentación fundamental de la soberanía de las naciones, en su consagración inmanente e inmutable, tal como la Divina Providencia las discerniera y el espíritu de cada una de ellas culminara, constituyendo unidas una de las más poderosas entidades del mundo en el concierto de los bienes universales”. (Mensaje a la Cámara de Representantes de la República Oriental del Uruguay, 25 de marzo de 1918).

“Cuando hayan desaparecido todos los gobiernos basados en las usurpaciones y se levanten los legítimos, cimentados por la opinión, se extinguirán con aquéllos, las últimas sombras de las corrupciones, perversiones y desdoros y aparecerán con éstos los resplandores de una nueva época… Reorganizada la República sobre la más completa representación, los gobiernos ejercerán sus funciones con eximia autoridad y con el aplauso público…La Unión Cívica Radical, que simboliza la grandeza de la Nación, habrá finalizado su cometido dejando gloriosamente cumplidos los fundamentos de su convocatoria en el monumento más grandioso de que haya sido capaz el espíritu humano”. (Memorial a la Mesa Directiva de la U. C. R. 30 de agosto de 1912). 1912

“Cuando asumí el Poder Ejecutivo de la República, entre las reglas de conducta que fijamos, fue una de ellas, que desde los estrados del poder, pasaríamos directa y únicamente a nuestras casas y de allí a las filas de la opinión que ha de cimentar y custodiar los esplendores alcanzados por nuestra Patria, para hacerla cada vez más eminente y grandiosa”. (Comunicación al presidente de la Legislatura de Jujuy, 20 de setiembre de 1921).

“No tengo más ensueño que la Nación como síntesis del bien de todos”. “La Unión Cívica Radical no está con nadie ni contra nadie, sino con todos para bien de todos”. (Mensajes al Congreso Nacional de 1921 y 1916, respectivamente).

Homenaje del Instituto Yrigoyeneano en el 70° aniversario de su fallecimiento.