Equipo Coordinador Nacional 2013 2016 Movimiento Familiar Cristiano

Equipo Coordinador Nacional 2013 -2016 Movimiento Familiar Cristiano Eucaristía Secretarios Nacionales de Área V “Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe”

“Nuestro tesoro es Cristo, no lo saquemos de nuestra vida”. (Papa Francisco JMJ Río 2013) «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Objetivo: › Que las familias del MFC tomen conciencia de que la Eucaristía es fuente, centro y culmen de la vida cristiana, para celebrarla existencialmente y tomar de ella la gracia para perseverar y dar testimonio de vida. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

“Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él”. (Jn 6, 55 -56) «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Preparación para recibir la sagrada comunión: San Rafael Guízar y Valencia. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Al término de las misiones, cuando ya han reflexionado sobre su vida y se han acercado al sacramento de la penitencia, la misa final es importantísima. Recibir el Cuerpo del Señor en estado de gracia no es cualquier acontecimiento, es el mejor momento que se puede vivir, por eso, les exhorta a prepararse para recibir la Sagrada Eucaristía con una oración. Puede parecer larga, pero eso les lleva a una mejor reflexión sobre lo que van a realizar. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

“Jesús mío Sacramentado, cuán triste y fatal es la impresión que se apodera de mí, al contemplar a mi pobre alma hundida en el mar inmenso de las miserias mundanas, donde no se encuentra ni el más ligero rasgo de la vida que sustenta el verdadero amor”. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Mas al dirigir mis miradas hacia ese Augusto Sacramento, allí descubro al Sol Divino, a la Caridad ardiente de infinita grandeza, a un Corazón que se encierra dentro de tu deífico pecho, el que desea con viva ansiedad formar un grande incendio en mi alma, para abrazarla con el fuego de tu amor. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

¡Oh, Padre amado!: si tú deseas estar conmigo para vivificarme con tu caridad, yo soy el siervo sediento que desfallecido por la sed que me devora, para saciarme busco las aguas cristalinas que se contienen en tu amorosísimo Corazón. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Como la flor del campo busca con ansiedad los rayos del sol para conservar la vida y su frescura, mi alma te busca a ti, oh amado mío, para que me des la vida que tanto necesito para alcanzar el cielo. Sin ti, Señor, sólo encuentro las sombras de la muerte. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Tu eres el pan que descendió del cielo, tu Carne es verdadera comida y tu Sangre verdadera bebida; de tus divinos labios brotaron aquellas preciosísimas palabras llenas de fuego y de amor divino: “Yo soy el camino, la verdad y la vida”. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

¿Qué haré yo, pues, en este escabroso desierto de la vida sin tu amor que forma el camino para el cielo? ¿Qué será de mí sin ese Sol vivísimo que destruye las horribles tinieblas de este mundo? ¿Qué haré para librarme de la muerte si me alejo de Ti que eres la Caridad ardiente y fuente de la vida sobrenatural? «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Ven, Jesús mío Sacramentado; ven a mi pobre corazón que tanto te necesita; no te detengas; estoy ansioso por comer el Pan Eucarístico; esa Hostia Santa descienda cuanto antes, al interior de mi alma, para que mi corazón se una íntimamente con el tuyo como se unen dos gotas de cera candente cuando caen en el mismo lugar; y abrazadas así mi alma en tu ardiente caridad, el purísimo amor que encierras dentro de tu pecho sostenga mi vida espiritual, me libre de la corrupción del mundo y me conduzca hasta lo más alto de los cielos, para continuar amándote en aquellas mansiones eternales. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Para después de la comunión simplemente pide dar gracias por “visitarlos”, reconociendo así su gran amor y correspondiéndole a Jesús de la misma manera. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Acción de gracias para después de la Sagrada Eucaristía. Señor, te damos gracias, con todo el corazón, por el bien tan grande que nos hiciste viniendo a visitarnos. ¡Cuánto nos amas! El amor tan grande que nos tienes te hizo venir a nosotros, pobres pecadores. Señor: también nosotros te amamos, con todo el corazón. Inflama nuestras almas, en el fuego de tu Amor Divino, para que, en cada momento de nuestra vida, te amemos, con todas las fuerzas del alma y así continuemos amándote, allá en el cielo, por toda la eternidad. Así sea. Será de mucho provecho que también nosotros nos preparemos para recibir la Sagrada Eucaristía. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Comunión espiritual Creo, Jesús mío, que estás presente en el santísimo Sacramento del Altar; te amo sobre todas las cosas y deseo recibirte en mi alma; pero ya no puedo hacerlo ahora sacramentalmente, ven, a lo menos espiritualmente, a mi corazón. Y como si ya hubieses venido te abrazo y me uno todo a ti. No permitas que jamás me aparte de ti. Amén «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

NOTA: La Comunión Espiritual se sugiere realizarla cuando estés frente al Sagrario. Cuando al asistir a la Eucaristía no puedes comulgar sacramentalmente por no estar preparado para recibirla. Te invitamos a que acudas lo más pronto posible al sacramento de la reconciliación. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

Recomendaciones para la vivencia de la Eucaristía «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

1. Participar como membresía de la Eucaristía mensual. Si no es posible que sea sólo para la membresía, se sugiere integrarse con la comunidad parroquial en una de las Eucaristías dominicales. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

2. Si la Eucaristía es sólo para la membresía, se sugiere tomar en cuenta las siguientes observaciones: • Área V, deberá organizar a los equipos del CBF para que se vayan rotando en la participación de la Eucaristía, promoviendo la asistencia de toda la membresía. • Es importante que el Área V recuerde a toda la membresía, a través de los matrimonios promotores de Equipo Básico y de los promotores zonales, de manera constante, la fecha y la hora de este encuentro con el Señor. «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

• Conformar en la medida de lo posible un coro con la misma membresía, para ambientar la Eucaristía. • Es recomendable que el Área V trate de proveerse de los materiales y accesorios indispensables para los momentos de oración, a saber: Manteles, corporales, velas, cerillos, floreros, campana, etc… «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»

“La Misa es el alimento espiritual que me sostiene, sin el cual no podría vivir un solo día, una hora de mi vida. ” (Madre Teresa) “Señor, te amo, ayúdame a amarte más y más”. Eustolio y Ma. Guadalupe Rodríguez Malagón Secretarios Nacionales de Área V «Familia misionera, santuario de la vida y transmisora de la Fe»