El Palacio Real de Queluz tambin conocido como
El Palacio Real de Queluz, también conocido como el Palacio Nacional de Queluz, es uno de los principales Palacios de la familia Real portuguesa, que a partir de su construcción se convirtió en la principal residencia de los miembros de la Casa de Braganza. A su alrededor se desarrolló la población de Queluz, ciudad cercana a Lisboa perteneciente al municipio de Sintra. Lo mandó construir en 1747 el infante, y después rey, Pedro III en el emplazamiento ocupado por un palacio de origen rural de los Marqueses de Castelo Rodrigo. El cuerpo principal del Palacio se inició en 1758 bajo las órdenes de la Reina María. Los principales arquitectos del recinto son los portugueses Mateus Vicente de Oliveira y Manuel Caetano de Sousa, además del francés Jean. Baptiste Robillo.
Conocido como el “Versalles Portugués”, la participación de los mejores arquitectos, decoradores y jardineros de Europa ayudaron a convertir el recinto del Palacio Real en un referente de la Arquitectura Palatina del siglo XVIII. A pesar de la influencia francesa e italiana, el palacio tiene rasgos típicamente portugueses, tales como la baldosa azul, los famosos “azulejos”.
El Salón del Trono, considerado la obra cumbre del neoclasicismo portugués, con revestimientos de espejos, estuco y tallas doradas al estilo de la sala de los espejos de Versalles. Este salón fue utilizado sobre todo como salón de baile y conciertos.
El Palacio sufrió serios daños por dos motivos; el gran terremoto del año 1. 775 que se produjo en Lisboa y la ocupación francesa que tuvo lugar en el año 1. 807. Las obras de transformación que se le realizaron, su hermoso diseño, su elegancia, la decoración de sus jardines, los frescos, los espejos, las maderas, las lámparas y los azulejos que decoran las salas del Palacio, lo fueron convirtiendo en el “Versalles de Portugal”, ya que al igual que en el Palacio francés, aquí hay una verdadera exaltación del lujo. Actualmente, el Palacio de Queluz es uno de los lugares preferidos por el turismo que visita Lisboa y desea conocer el Patrimonio Histórico de sus alrededores.
La "Sala de los Embajadores", donde los Reyes recibían las credenciales de los Embajadores que llegaban a Portugal. Tiene acceso directo desde el jardín para que estos Embajadores pudieran entrar directamente desde la calle hasta la Sala. En la primera imagen se ven dos “Tronos" uno para los Reyes y otro para los Príncipes. En la segunda imagen se puede observar que el trono de los Reyes, está más alto que el de los Príncipes. Se supone querían dejar claro quien mandaba. La última imagen es del techo de esta Sala de Embajadores.
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