El lechn asado de Juan Bobo Yolanda Rodrguez
El lechón asado de Juan Bobo Yolanda Rodríguez Rivera COIS 600 Profa. Marta I. Ortiz Román 1 ra Lección 7 de febrero 2015
Título: El lechón asado de Juan Bobo Tema: Fabulas Objetivo Terminada la lectura, El lechón asado de Juan Bobo, podrás, inferir sobre la lectura, contestar preguntas, describir a los personajes, identificar idea centrar y tener el concepto de fabula más claro.
El lechón asado de Juan Bobo Tres cerditos vivían en un bosque. Uno era grande y gordo. Otro era gordo y pequeño. Otro era pequeño y flaco. Por ese boque pasaba un día Juan Bobo. Había andado mucho y tenía mucho apetito. -¡Oh, si yo encontrará comida! ¡Que hambre tengo! - decía.
En eso vio uno de los cerditos se le acerco sin hacer ruido y lo cogió. Era el cerdo grande y gordo. -¡Ah! Ahora tendré lechón asado-dijo. Al poco rato vio otro de los tres cerditos. Era el gordo y pequeño. -Realmente es mejor. Los cerdos grandes no sirven para asar. Ese es más pequeño-dijo Juan Bobo. De modo que soltó el que tenía en las manos. De un salto cogió el otro. -¡Ah! ¡Qué sabroso! De este me comeré hasta los huesos. - Dijo Juan Bobo.
Ya se iba cuando vio el tercer cerdito. Este era pequeño y flaco. -Ese es mejor todavía- exclamo Juan Bobo-. Los cerdos gordos no sirven para asar. De modo que soltó el que tenía en las manos y se puso a perseguir el otro.
Este corría ligerísimo. Subieron y bajaron montañas. Cruzaron ríos. Al fin Juan Bobo logro cogerlo. -¡Ah! – Dijo Juan Bobo- ¡Qué buen lechón! El cuero quedará tostadito.
Frente a él había una mata de plátano. La mata tenía un pesado racimo. Juan Bobo se le quedo mirando y dijo. -El lechón hay que comerlo con plátano. De modo que decidió coger los plátanos. Pero el cerdito le ocupaba las dos manos. – Lo pondré en el suelo-dijo Juan Bobo- Como lo dijo lo hizo.
• El cerdo en un segundo se echo a correr otra vez. Corrió tan ligero que se perdió de vista. Juan Bobo se quedo con la boca abierta. Entonces se fijo donde estaba. Persiguiendo aquel animal tan arico se había perdido en el bosque oscuro. • Empezó a llorar desconsoladamente, pues no sabía qué dirección tomar. ¡Cómo gritaba el pobre Juan! Le dio tanto miedo que se acostó a dormir.
• Unos vecinos que pasaban por el lugar lo reconocieron y se lo llevaron para su casa. Por la mañana Juan despertó tan contento que le prometió a su mamá nunca más escaparse a buscar cerdos.
El lechón asado de Juan Bobo Tarea: Infiere sobre la lectura 1. El segundo lechón que atrapo Juan Bobo fue grande y gordo pequeño y flaco pequeño y gordo 2. Si Juan Bobo tiene mucho apetito es porque: comió plátanos no había comido no le gustaba comer
3. Si Juan Bobo suelta el lechón para coger los plátanos: se escapa el lechón los agarra a ambos 4. Juan Bobo aprendió que; hay que agarrarlo todo hay que asegurar lo que ya tienes
- Slides: 11