El futuro La forma del tiempo futuro Para

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El futuro

El futuro

La forma del tiempo futuro Para formar el tiempo futuro, se ponen las terminaciones

La forma del tiempo futuro Para formar el tiempo futuro, se ponen las terminaciones siguientes después de la forma infinitiva de la mayoría de los verbos é emos ás éis á án Hablaré contigo mañana. Viviremos juntos algún día. Comerás la cena más deliciosa.

Formas irregulares Algunos verbos raíces irregulares en el futuro, pero usan las mismas terminaciones.

Formas irregulares Algunos verbos raíces irregulares en el futuro, pero usan las mismas terminaciones. Caber cabr- é, Decir dir- ás Hacer har- á Poder podr- emos Poner pondr- éis Querer querr- Saber sabr- Salir saldr- Tener tendr- Valer valdr- Venir vendr- án

El uso del tiempo futuro El tiempo futuro se refiere a una acción que

El uso del tiempo futuro El tiempo futuro se refiere a una acción que definitivamente pasará: equivale will, shall or is going to. Saldrás con Felipe después de cena. El futuro también se refiere a una acción potencial; una probabilidad o conjetura en el presente. (asociado más que todo con preguntas) El esposo de Gloria tendrá unos cincuenta años ? Verdad? Me pregunto dónde estarán mis llaves. Hoy será el primero de Diciembre?

Volverán las oscuras golondrinas Gustavo Adolfo Bécquer Volverán las oscuras golondrinas de tu balcón

Volverán las oscuras golondrinas Gustavo Adolfo Bécquer Volverán las oscuras golondrinas de tu balcón sus nidos a colgar, y otra vez con el ala a tus cristales, jugando, llamarán. Pero aquéllas que el vuelo refrenaban tu hermosura y mi dicha a contemplar, aquéllas que aprendieron nuestros nombres. . . ésas. . ¡no volverán ! Volverán las tupidas madreselvas de tu jardín las tapias a escalar y otra vez a la tarde aún más hermosas sus flores se abrirán. Pero aquéllas cuajadas de rocío, cuyas gotas mirábamos temblar y caer como lágrimas del día. . . ésas. . . ¡no volverán ! Volverán del amor en tus oídos las palabras ardientes a sonar, tu corazón de su profundo sueño tal vez despertará. Pero mudo y absorto y de rodillas como se adora a Dios ante el altar, como yo te he querido. . . , desengáñate, nadie así te amará.