EL ARTE DE LOS PUEBLOS INVASORES ARTE MEROVINGIO

EL ARTE DE LOS PUEBLOS INVASORES ARTE MEROVINGIO, OSTROGODO y LOMBARDO

Arte Merovingio: Saint-Gilles-du-Gard

Arte Merovingio: Baptisterio de San Juan de Poitiers

Arte Merovingio: Baptisterio de San Juan de Poitiers. Detalle del ábside.

Arte Merovingio: Baptisterio de San Juan de Poitiers. Detalle de la torre.

Arte Ostrogodo: Mausoleo de Teodorico. Rávena.

Arte Lombardo (740): Altar de Ratchis. Iglesia de San Martín. Cividale.

Arte Lombardo (740): Altar de Ratchis. Visitación de María. Iglesia de San Martín. Cividale.

Arte Lombardo (Siglo VIII): Pila bautismal de Callisto. Museo de la Iglesia. Cividale.

EL ARTE DE LOS PUEBLOS INVASORES EL ARTE HISPANO-VISIGODO

Arte Hispano-Visigodo: Arquitectura. Asumida la religión dominante en Occidente -el cristianismo-- por parte de reyes visigodos y pueblo llano, se comprende fácilmente la construcción de nuevas iglesias, de las que hoy en día contamos con escasos ejemplos. Se trataba de pequeñas iglesias rurales construidas según una arquitectura elemental, a base de gruesos muros, volúmenes rotundos donde predomina el macizo sobre el vano. Iglesia visigoda en Quintanilla de las Viñas (Burgos), uno de los escasos ejemplos llegados a nuestros días. Debajo, iglesia de San Pedro de la Nave (Zamora), desmontada y trasladada a otro lugar en el siglo XX por causa de la construcción de un embalse.

Arte Hispano-Visigodo: Los muros. De la iglesia de Quintanilla de la Viñas (Burgos) sólo se conserva la cabecera y el transepto. Constructivamente los gruesos muros de sillería suelen seguir la tradición del opus quadratum romano. La pesadez de muros, unida a la escasez de huecos, provoca la pobre iluminación de los interiores. Destaca la decoración exterior de los frisos.

Arte Hispano-Visigodo: Los muros. Quintanilla de las Viñas (Burgos), detalle de los frisos exteriores. Los elementos decorativos se presentan en forma de relieves sobre los muros en forma de franjas con motivos geométricos o vegetales geometrizados, antinaturalistas en definitiva. Esa decoración abstracta, sistemática y repetitiva, propia de culturas foráneas, contrasta con el sentido mediterráneo, proclive a la representación figurativa de carácter cerrado, simétrico, finito y acabado.

Arte Hispano-Visigodo: San Juan de los Baños. Zonas desaparecidas. Dentro de la escasa de iglesias visigodas que ha llegado a nuestros días destaca la iglesia de San Juan de Baños de Cerrato (Palencia), (h. 661). Bastante modificada a lo largo del tiempo, presenta planta basilical de tres naves separadas por hileras de columnas. A ambos lados del presbiterio, dos cámaras de origen desconocido (hoy desaparecidas) hablan de la posible habitación de un ermitaño retirado en soledad o simplemente al cuidado de la iglesia.

Arte visigodo : San Juan de los Baños (Palencia). Exterior En la iglesia visigoda de Baños se aprecia perfectamente el empleo de un arco de herradura sobre la puerta occidental, así como la fábrica de sillería y la manifestación al exterior de la nave central (más alta y ancha), las laterales, y el transepto (al fondo). En la fachada occidental destaca un pórtico, a modo de nártex, con discutido remate de espadaña ejecutado en el siglo XX. (espadaña: pequeño elemento de coronación destinado a alojar la campana).

Arte visigodo: San Juan de los Baños. Interior San Juan de Baños (interior). Las naves se cubren con techumbre de madera mientras que el presbiterio cuadrado lo hace con bóveda de herradura construida en sillería. Las columnas de separación de las naves, que sostienen la arquería, elementos romanos reutilizados, son de capitel corintio, de hojas muy esquematizadas, reciben arcos de herradura que separan las naves.

Arte visigodo: San Fructuoso de Montelios. (Portugal). Detalle del Interior.

Arte Hispano-Visigodo : San Fructuoso de Montelios. (Portugal).

Arte Hispano- Visigodo : Santa Comba de Bande (Orense). Planta. Iglesia de Santa Comba de Bande (Orense): destaca el empleo de bóveda de arista en el crucero. La iglesia muestra el escalonamiento de las partes del edificio desde el cimborrio central hasta la capilla mayor. La construcción es de granito cortado en grandes bloques desiguales y asentados en hiladas irregulares, según las técnicas locales. En esta iglesia es muy difícil diferenciar las restauraciones medievales; la celosía de la ventana de la capilla y el friso interior de ésta son de gran calidad y de estilo muy clásico

Arte Hispano-Visigodo : San Pedro de la Nave (Zamora). Iglesia de San Pedro de la Nave (Zamora), fue trasladada a El Campillo durante los década de los años treinta al efectuarse el embalse del río Esla. Iglesia de tres naves y un transepto que remata en un tramo más la cabecera. Se trata de una solución arquitectónica intermedia entre la disposición basilical tardoromana y la planta centralizada de las iglesias visigodas.

Arte Hispano-Visigodo: Quintanilla de las Viñas (Burgos). Capitel con el Sacrificio de Isaac. El interior de esta iglesia se caracteriza por la riqueza escultórica, repartida en las dovelas del arco central y en bloques escultóricos que cumplen la función de capiteles (bloques de sillares tallados con ángeles y personajes bíblicos). Este capitel de forma troncopiramidal tiene representado en el frente el Sacrificio de Isaac y en los laterales San Pedro y San Pablo. En la parte superior tiene un ábaco o losa cuadrada con decoración de roleos o tallos enroscados que encierran aves picoteando racimos de uvas simbolizando la ayuda que la eucaristía puede ofrecer al fiel. El estilo es sencillo y expresivo, el artista se preocupa más por representar los pequeños detalles que las proporciones. Muchos de los elementos de estos capiteles se repetirán en las miniaturas mozárabes, como la inscripción que aparece en la parte superior aludiendo al motivo representado.

Arte Hispano-Visigodo: Quintanilla de las Viñas (Burgos). Capitel representando a Daniel en el foso de los leones (detalle). Daniel aparece representado en el foso de los leones. Viste túnica corta y levanta las manos a la manera del orante paleocristiano. Las tres figuras aparecen dentro de un medio líquido, esto se debe a una traducción errónea del texto en el que se leía Daniel en el lago de los leones. Este capitel y el anterior tenían un sentido didáctico. Se recomienda al fiel obedecer a Dios ante todo como hizo Abraham y solicitar su ayuda por medio de la oración como en el caso de Daniel. En cada lateral de los capiteles aparece un apóstol que recuerda su ejemplo y dedicación a Cristo.

Capitel prismático figurado. Relieves de la Iglesia de Quintanilla de las Viñas. Colocado sobre la columna derecha del arco toral. Recibió la inscripción de su dedicante, la señora Flammola, que edificó la iglesia por un voto. El otro lado del arco está representada la Luna, en la misma disposición que el Sol; parece que su sentido simbólico es el de representar a Cristo como el astro solar y a la Iglesia como su satélite que, sólo desprende un pálido reflejo de luz, aunque la originalidad del tema así aplicado puede ser debida a una idea personal de quien encargó su ejecución.

Capitel prismático figurado. El estilo del decorador de es la iglesia es lineal; todas las figuras están de frente y recortadas en un solo plano sobre un fondo profundo, pero sin plano interiores; todo esto se debe haber tomado de dibujos por un artista sin ninguna formación en el modelado; la composición se basa en la iconografía de las apoateosis de emperadores acompañados de genios alados, que aquí se sustituyen por Cristo y dos ángeles.

San Pedro de la Nave. Zamora (siglo VII d. C. ) Decoración con roleos vegetales en una imposta. San Pedro de la Nave. Zamora (siglo VII d. C. ) -En la arquitectura visigoda es muy frecuente encontrar entre los muros bandas con decoración geométrica o vegetal. - La imposta es una moldura sobre la que se asienta un arco. En este caso su decoración se organiza en torno a unos tallos vegetales muy simplificados que rodean a los elementos decorativos. -Estos motivos vegetales tienen su origen en la simbología cristiana primitiva que se difundió desde Oriente al reino visigodo.

Arte Hispano-Visigodo: decoración interior. Las pobres condiciones lumínicas, la pequeñez del espacio interior y la estética de la piedra desnuda nos trasladan mentalmente a la Alta Edad Media. Pero no debemos pensar que estos espacios se encontraban originariamente desnudos de ornamento. Al contrario, el gusto del hombre medieval no permitía la desnudez de los muros, por lo que estos interiores solían pintarse de colores y se complementaban con ricas piezas de orfebrería, por ejemplo crucifijos o coronas votivas). Se trata de coronas que los reyes visigodos entregaban el día de su coronación en señal de ofrenda o voto. Chapadas en oro y enriquecidas con piedras preciosas, se colocaban en el altar. Corona votiva de Recesvinto, h. 700.

Cruz Colgante de la corona de Recesvisnto. Como complemento central de la corona de Recesvinto se empleó esta cruz con piedras preciosas engastadas y parejas de perlas en cápsulas en los extremos de los brazos, que puede ser una importación bizantina. El modelo fue buen acogido y se hicieron muchas imitaciones visigodas con piedras y perlas en cabujones de la misma distribución sobre cruces de láminas planas.

Hebilla Visigoda.

Arte Hispano-Visigodo: Orfebrería. Las fíbulas eran unos alfileres imperdibles que se colocaban en los hombros y servían para sujetar la túnica. En el alfiler de la imagen la aguja queda oculta completamente por el cuerpo de un águila. Esta forma animalística tiene su origen en la Europa Oriental. Toda la superficie aparece cubierta por celdillas que contienen granates combinados con cristales de colores. Estas coronas las ofrecía el monarca el día de su coronación como símbolo de entrega de su poder a la divinidad y colgaban sobre los altares siguiendo la tradición bizantina. El aro es calado y está decorado con incrustaciones de granates, perlas y zafiros. La corona cuelga de cuatro cadenas con eslabones en forma de corazón que penden de una flor doble y un capitel decorado en la parte superior. La parte inferior la componen unas letras colgantes que forman el nombre del monarca, acompañadas de esmeraldas, zafiros y perlas.

EL ARTE DE LOS PUEBLOS INVASORES ARTE CAROLINGIO Y OTONIANO

Arte Carolingio: Capilla Palatina de Aquisgrán. La construcción de esta capilla se inició en el 798, siendo consagrada al culto en el año 805. Es obra del arquitecto EUDES DE MENZ, quien se inspira en la iglesia de san Vital de Rávena. Es un edificio formado por un cuerpo central octogonal, cubierto con bóveda de casquetes, y una nave en torno que se organiza en tramos trapeciales y triangulares.

Arte Carolingio: Pórtico de la Abadía de Lorch. La construcción de esta capilla se inició en el 798, siendo consagrada al culto en el año 805. Es obra del arquitecto EUDES DE MENZ, quien se inspira en la iglesia de san Vital de Rávena. Es un edificio formado por un cuerpo central octogonal, cubierto con bóveda de casquetes, y una nave en torno que se organiza en tramos trapeciales y triangulares.

Arte Carolingio: Estatua ecuestre de Carlomagno. Entre los escasos ejemplos conservados de escultura carolingia, sobresale la Estatua Ecuestre de Carlomagno, realizada en bronce, que se inspira en ejemplos clásicos, como la de Constantino.

Arte Carolingio: Artes Aplicadas. Detalle del Altar de oro de San Ambrosio, Milán (850). Obra del maestro VOLVINUS. Imagen-relicario de Santa Fe de Conques (finales del s. IX). El núcleo de la imagen es de madera, forrada de oro. Esmaltes de influencia bizantina: las piedras preciosas se sujetan a través de engarces, y se emplea la filigrana y el nielado para ornamentar las superficies.

Arte Carolingio : Evangelios llamados Gonduino. Escuela de Autun. Detalle de la Maiestas. Biblioteca Municipal de Autun. Francia (siglo IX). Esta imagen está influenciada por la estética de los pueblos bárbaros, el cuerpo es plano y se representa de una manera torpe sin respetar las proporciones.

Arte Carolingio : Evangelario de la Coronación. Escuela Palatina de Aquisgrán. San Marcos. Museo de Historia. Viena. ( IX). Una pequeña parte de la producción de libros que se producían en el Imperio Carolingio recibía un tratamiento de lujo convirtiéndolos en auténticas obras de arte. Se utilizaban hojas de pergamino y se coloreaban con ricas tintas, púrpuras y oros, y se encuadernaban con metales preciosos. Esta imagen se encuadra, como la anterior, en la tendencia naturalista de influencia clásica.

Arte Carolingio: Artes Aplicadas. Supuesto retrato de un evangelista. Biblioteca Real, Bruselas, (hacia el siglo IX d. C. ). Durante el Imperio Carolingio se llevó una política imperial de restauración del pasado por lo que comenzaron una labor de reproducción de textos romanos. Por este motivo desarrollaron todas las artes relacionadas con los libros. En la estética carolingia se pueden distinguir dos tendencias una próxima al románico con tendencia a la abstracción y otra naturalista de tradición clásica en la que se enmarca esta miniatura.

Arte Otoniano: San Miguel de Hildesheim. Destacan los muros articulados, cabecera con crucero y “cuerpo occidental”.

Arte Otoniano: San Miguel de Hildesheim. Detalle de las Puertas de bronce (1015). La rotundidad del volumen de esta imagen de la Virgen hace que esta pieza participe de los mismo planteamientos estilísticos que la imaginería coetánea. JANTZEN se ha referido a estas escenas denominándolas miniaturas fundidas.

Arte Otoniano: San Pantaleón de Colonia. Destacan los muros articulados, cabecera con crucero y “cuerpo occidental”.

Arte Otoniano: Santa María de Mittelzel. Destacan los muros articulados (bandas y arquillos ciegos), cabecera con crucero y “cuerpo occidental”.

Arte Otoniano: Escultura. Virgen dorada de Essen. Crucifijo del Arzobispo Gero. Catedral de Colonia.

Islas Británicas: Crucifijo. En una talla de marfil. Forma parte de lo que se ha conocido como estilo Winchester del marfil. El cuerpo de un Cristo de cuatro clavos se fija a una cruz de oro afiligranado con engaste de esmalte cloisoné representado el tetramorfos y el letrero. Por su relación con la miniatura se ha fijado una cronología de hacia el año 1000. El artista ha sabido dotar el rostro de un estado anímico que no se aprecia en las imágenes pintadas, a veces simples caras inexpresivas, parece como si acusase la expresión de la interiorización que la plástica otoniana ha creado en las series de sus crucificados.

Arte Otoniano: Cristo clamando en la tempestad. Miniatura de los Evangelios de la abadesa Hitda. Darmstadt, Hessische Landesbibliothek, (siglo X). Las representaciones pictóricas otonianas han desaparecido prácticamente en su totalidad sin embargo se conserva un buen número de libros miniados. La mujer tuvo un papel muy importante en la política y en la sociedad otoniana, este protagonismo se refleja en el gran número de códices miniados que encargaron. Esta obra fue producida en Colonia y se caracteriza por su estilo expresionista. Tiene influencia de la pintura bizantina que se refleja hasta en los rasgos fisonómicos de los personajes.

Arte Otoniano: Codes Aureus. Escuela de Echternach. Alemania.

Islas Británicas: Artes Aplicadas. Cristo en majestad. Miniatura de la Biblia Stavelot. Biblioteca Británica, Londres. (hacia el siglo XI d. C. ) • Inglaterra se integró en la cultura románica cuando rompió sus vínculos con los países escandinavos al ser conquistada por los normandos. • A pesar de la invasión normanda los talleres insulares siguieron trabajando y al entrar en contacto con la pintura románica renovaron su estilo. • Esta Biblia muestra una imagen típicamente románica, el Pantocrátor rodeado por los símbolos de los evangelistas.

Islas Británicas: Artes Aplicadas.

Islas Británicas: Artes Aplicadas. Libro de Kell. Trinty College. Dublin.

Islas Británicas: Artes Aplicadas. Libro de Kell. Trinty College. Dublin.

Italia: Artes Aplicadas. Escuela de Siena. Frontal de San Pedro. Pinacoteca Nacional de Siena, (hacia 1280 d. C. ). La parte central del frontal está presidida por San Pedro sedente con las llaves, que son el atributo que le caracteriza, cobijado por un arco lobulado. En los laterales aparecen escenas de la vida de Cristo y de San Pedro por ejemplo la negación del Santo o su crucifixión. La escuela sienesa se caracteriza por las figuras elegantes sinuosas y estilizadas. Los fondos suelen ser dorados por influencia bizantina.