DE COLORES La vida est llena de mil

DE COLORES … La vida está llena de mil colores. Son los colores que hemos aprendido a reconocer a través de las grandes ventanas, que son los ojos. Pero muchas veces esos ojos nos pueden engañar y nos hacen reflejar en cada color lo que sentimos, en ese instante, dentro de nosotros. Por ejemplo: si tenemos distancia con las heridas al ver el rojo nos sentimos retraídos y con temor. O cuando tenemos un familiar que hace poco partió a la eternidad el negro nos embiste y nos trae recuerdos tristes. O también, si tenemos malversación por un partido político y si vemos ese color nos golpea y nos saca de nuestra tranquilidad. En los años sesenta apareció una agrupación musical “Viva la Gente” y se hicieron populares con dos canciones. Una de las cuales era ¿De qué color es la piel de Dios? Dije: negra, amarilla, roja y blanca es todos son iguales a los ojos de Dios. Y él asombrado preguntó: "Si todos son iguales a los ojos de Dios, ¿Por qué en el mundo hay tanto temor, y entre razas, odio y rencor? Dame un solo color y pintaré la vida de alegría

Vale la pena, en este momento de tantas convulsiones poder decir, con claridad, si encontramos a Dios en los diversos colores que tiene la vida, incluso en los más oscuros. Esto nos puede atormentar ya que hay situaciones donde el verde se convierte en rojo. Llegas a tu casa tranquilo y te encuentras con un escándalo, un insulto o la verdad de la traición. Entonces nos podemos estar moviendo a través de los colores. Me levanto con el azul del cielo que me regala Dios. Con el blanco de la pureza llevo mis oraciones a Dios para tender en el horizonte el verde esperanzador que me deparará el nuevo día. Me encuentro con mi clara esposa que me da el rojo beso de la pasión amorosa para que de inmediato, tenga contacto con la incolora agua que moja y despierta mi ser. Luego abrazo a mis rosadas hijas y a mis fuertes y marrones hijos que con carpetas de mil colores buscan el saber en colegios y liceos. Al despedirme de la casa de columnas del amarillo oro y del negro señorial me encuentro con el pregonero de tez blanquecina que me dice que no durmió bien anoche para gritarme la oscura noticia, junto al carnaval de colores de los que triunfan y cumplen años … Dame un solo color y pintaré la vida de alegría

Dios es y está en todos los colores Nos toca a cada uno estar al tanto para encontrar esa presencia de Dios. Pues habrá que recordar y poder sentir que los colores no se ven con los ojos, sino que se verán mejor y más con el corazón. Y que lo esencial es invisible para los ojos. Entonces podemos decir: El Blanco: significa alegría y pureza. El Verde: significa esperanza. El Morado: significa luto y penitencia. El Rojo: significa el fuego del Espíritu y el martirio. Dame un solo color y pintaré la vida de alegría

Influencia de los colores … Son muchos los que dentro de una sana creencia, que nada tiene que ver con al superstición, ven en los colores una forma de relacionarse y enfrentarse a la vida. Aunque se debe evitar una práctica irregular de ver los colores como algo mágico y dentro de rituales de santería donde la mala racha se produce por un color mal colocado en determinado sitio de la casa o del local comercial. Azul: Tranquiliza, ayuda a conciliar el sueño y aumenta la impresión de amplitud. Rojo: Estimulante y cálido. Reduce la sensación de espacio. Naranja: Alegre y dinámico. Gris: Puede resultar algo triste y opresivo, aunque el gris azulado es el más relajante. Verde: Relajante, pero puede inducir a la apatía. Amarillo: Muy excitante. Si se utiliza sólo puede ser irritante. Turquesa: Sumamente fresco, ideal para zonas muy cálidas. Blanco: Aporta serenidad y equilibrio. Dame un solo color y pintaré la vida de alegría

De colores, de colores se visten De colores, de colores brillantes y finos los campos en la primavera. se viste la aurora. De colores, de colores son los pajarillos De colores, de colores son los mil reflejos que viene de afuera … que el sol atesora De colores, de colores es el arco iris De colores, de colores se viste el diamante que vemos lucir Y por eso los grandes amores y por eso los grandes amores de muchos colores me gustan a mí. Jubilosos, jubilosos vivamos en gracia puesto que se puede. Saciaremos, saciaremos la sed ardorosa del rey que no muere. Jubilosos, jubilosos llevamos a Cristo un alma y mil más. Difundiendo la luz que ilumina la gracia divina del gran ideal. Dame un solo color y pintaré la vida de alegría. Padre Marcelo Rivas S.