Consejos para un despertar Misionero Parte I Eduardo

Consejos para un despertar Misionero Parte I Eduardo Iván González

Ilustración 1: Se cuenta que un predicador le preguntó a un actor llamado Alejandro Treviño, como hacía para tener tanto éxito en la tarima del teatro con lo que decía. Muy sencillo le dijo: “Es que nosotros los actores decimos las cosas falsas como si fueran cosas ciertas, pero ustedes los predicadores de las cosas ciertas como si fueran falsas”.

JESÚS HABLÓ CON AUTORIDAD “Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas”. (Mateo 7: 28, 29) Lo primero que hizo Jesús, en cuanto a obra misionera se refiere, fue hacer discípulos. También, le dio un trato personal a muchos. Trabajó de persona a persona, como lo hizo con Nicodemo o el Joven rico.

RAZON DE EXISTIR DE LA IGLESIA “La Iglesia es el medio señalado por Dios para la salvación de los hombres. Fue organizada para servir, y su misión es la de anunciar el Evangelio al mundo. Desde el principio fué el plan de Dios que su iglesia reflejase al mundo su plenitud y suficiencia. Los miembros de la iglesia, los que han sido llamados de las tinieblas a su luz admirable, han de revelar su gloria” (HA. p. 9). “Cualquier traición a la iglesia es traición hecha a Aquel que ha comprado a la humanidad con la sangre de su Hijo unigénito”. (Ídem, p. 10).

MUCHAS VECES NOS SENTIMOS DEMASIADO… : “Los jefes judíos se consideraban a sí mismos demasiado sabios para necesitar instrucción, demasiado justos para necesitar salvación, demasiado altamente honrados para necesitar el honor que proviene de Cristo. El Salvador se apartó de ellos para confiar a otros los privilegios que ellos habían profanado y la obra que habían descuidado. La gloria de Dios debe ser revelada, su palabra afirmada. El reino de Cristo debe establecerse en el mundo. La salvación de Dios debe darse a conocer en las ciudades del desierto; y los discípulos fueron llamados para realizar la obra que los jefes judíos no habían hecho” (Hap. P. 14) RAZONES PARA SALIR A PREDICAR: 1. “Para declarar al mundo lo que habían visto y oído de él… 2. Habían de ser colaboradores con Dios para la salvación de los hombres. (Hap. p. 16)

LA UNIDAD ES PRIMORDIAL: En estos primeros discípulos había notable diversidad. Habían de ser los maestros del mundo, y representaban muy variados tipos de carácter. A fin de realizar con éxito la obra a la cual habían sido llamados, estos hombres, de diferentes características naturales y hábitos de vida, necesitaban unirse en sentimiento, pensamiento y acción. Cristo se propuso conseguir esta unidad. Con ese fin trató de unirlos con él mismo. La mayor preocupación de su trabajo en favor de ellos se expresa en la oración que dirigió a su Padre: “Para que todos sean una cosa; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean en nosotros una cosa; ” “y que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado, como también a mí me has amado. ” Juan 17: 21, 23. (Hap. p 17

“El mundo mira con satisfacción la desunión de los cristianos. . . No dejemos a Satanás la posibilidad de señalar con el dedo a los miembros de nuestra iglesia, diciendo: “Mirad como éstos, que se hallan bajo el estandarte de Cristo, se aborrecen unos a otros”. JT 3 “El apóstol Juan escribe en 1 Juan 4: 7 -11 “Carísimos, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. . . debemos amarnos los unos a los otros. . . ” Hay hoy una gran necesidad de amor fraternal en la iglesia de Dios (Ídem).

CUANDO CRISTO DIJO (LLAMÓ) A SUS DISCÍPULOS: 1. Salid en mi nombre para traer a la iglesia a todos los que crean, les presentó claramente la necesidad de conservar la sencillez. Cuanto menor fuera su ostentación, mayor sería su influencia para el bien. Los discípulos habían de hablar con la misma sencillez con que había hablado Cristo. Debían impresionar en sus oyentes las lecciones que él les había enseñado. (HA p. 23) Mientras los discípulos esperaban el cumplimiento de la promesa, humillaron sus corazones con verdadero arrepentimiento, y confesaron su incredulidad. Al recordar las palabras que Cristo les había hablado antes de su muerte, entendieron más plenamente su significado. Fueron traídas de nuevo a su memoria verdades que habían olvidado, y las repetían unos a otros. Se reprocharon a sí mismos el haber comprendido tan mal al Salvador. (HA. P. 29) Los discípulos oraron con intenso fervor pidiendo capacidad para encontrarse con los hombres, y en su trato diario hablar palabras que pudieran guiar a los pecadores a Cristo. Poniendo aparte toda diferencia, todo deseo de supremacía, se unieron en estrecho compañerismo cristiano. (HA. p. 30)

Consejos para un despertar Misionero Parte II

ILUSTRACIÓN 2: La historia de Antonio y Conrado (el zapatero remendón de Jerusalén). (Use su inventiva para sacar la lección) 1. Antonio quiso irse al campo (aislado) para convertirse en un santo. (Cuando creyó que lo había logrado un ángel le dijo que fuera a Jerusalén para buscar a Conrado que era más santo que él) 2. Cuando le preguntó a Conrado, solo le preguntó que hacía para ser más santo que él y le contestó que todo lo que el hacía, las sandalias que reparaba, lo hacía como si fuera para Jesús. 3. Allí estaba el secreto de Conrado

TODO COMO SI FUERA PARA CRISTO Tenemos un mensaje que dar “Y Pedro les dice: Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare” (HA p. 35).

¿POR QUÉ NO PUDIERA ESTAR PROGRESANDO LA IGLESIA? TIPS, TOMADOS DEL LIBRO DE E. W, “CONSEJOS PARA LA IGLESIA” 1. ) “Evitad el leer y mirar cosas que sugerirán pensamientos impuros. Cultivad los poderes morales e intelectuales”. (CPI p. 195) 2. ) “La muerte antes que el deshonor o la transgresión de la ley de Dios debiera ser el lema de todo cristiano… El pecado y los pecadores que hay en la iglesia deben ser eliminados (erradicados) prestamente, a fin de que no contaminen a otros. La verdad y la pureza requieren que hagamos una obra más cabal para limpiar de Acanes el campamento. No toleren el pecado en un hermano los que tienen cargos de responsabilidad. Muéstrenle que debe dejar sus pecados o ser separado de la iglesia” (CPI p. 196).

3. ) “Tan pronto como reconocemos nuestra incapacidad para hacer la obra de Dios, y nos sometemos a él para ser guiados por su sabiduría, el Señor puede trabajar con nosotros. Si estamos dispuestos a desterrar el egoísmo de nuestra alma, él suplirá todas nuestras necesidades” (CPI p. 98). Capítulo 7—Dios tiene una obra para usted “La obra de Dios en esta tierra no podrá nunca terminarse antes que los hombres y mujeres abarcados por el total de miembros de nuestra iglesia se unan a la obra y aúnen sus esfuerzos con los de los pastores y dirigentes de las iglesias” (CPI p. 103)

4) “La regeneración es el único sendero que da acceso a la ciudad de Dios… debemos conducir a hombres, mujeres y niños, enseñándoles que para salvarse deben poseer un corazón y espíritu nuevos. Los antiguos rasgos de carácter hereditarios deben ser vencidos. Los deseos naturales del alma deben cambiar. Toda malicia, toda mentira, toda calumnia, deben eliminarse. Debe vivirse la vida nueva que nos hace parecer a Cristo” (CPI p. 105). “En todas nuestras filas se práctica la falta de honradez; y ésta es la causa de la tibieza que notamos en muchos de los que profesan creer la verdad. Estos no están relacionados con Cristo y están engañando sus propias almas. Me duele declarar que hay una alarmante falta de honradez aun entre los observadores del sábado” (CPI p. 150)

Isaías 1: 5 -8 Entonces exclamé: "¡Ay de mí. que soy muerto! Porque soy hombre de labios impuros, que vivo entre un pueblo de labios impuros, y mis ojos han visto al Rey, al Eterno Todopoderoso“… tocó mi boca, y dijo: "Mira, esto tocó tus labios, y ha sido quitada tu culpa, y perdonado tu pecado". La misión de Isaías (La Misión de la Iglesia) 8 Después oí la voz del Señor, que dijo: "¿A quién enviaré? ¿Quién irá de nuestra parte? " Entonces respondí: "Aquí estoy, envíame a mí".

Entonces respondí: "Aquí estoy, envíame a mí". ¿QUÉ RESPONDEREMOS ANTE ESE LLAMADO, QUE ES PARA NOSOTROS TAMBIÉN? ¿CUÁNTOS LEVANTANDO SU MANO LE DICEN AL SEÑOR : “AQUÍ ESTOY, ENVÍAME A MÍ”